Tierna, tierna cosa es
el tiempo que deriva en una palabra
sin puerto. Gozar la luna sin
sacrificio, ni
lo malo triste pisado,
el rayo en su trabajo.
¿Quién puede oír las guerras didácticas del pecho?
¿Brasas que los sentidos disfrazan
de un lado al otro de los cuentos?
Se oxidaron los goznes
del deseo a la espera del deseo,
ahorita, ahorita, dicen
almas piadosas inflamadas.
En las rocas que rompen por la mitad en el cielo
hay caminos, distancias,carpinteros del ser.
El uno y el amor se juntan
en ignorancias, pájaros
que se murieron
jóvenes, los entierran, hay
hermanos en la hora,
No hay comentarios:
Publicar un comentario