Si me observas, si me llamas con tu deseo, será entre sueños y realidad que llevaré mi flor hasta ti, para ponerla en tus labios y que ésta te cierre los ojos con un beso. Así nos quedaremos bajo nuestras sábanas y respirarás mi aliento y dormiremos abrazados sin importarnos el nombre del sol que nos despierte.Besaré cada caricia que dibujes en mi cuerpo y mis manos se abrirán paso a cada oculto lugar que se esconde debajo de tu ropa. Luego te abrigaré con mi piel y allí olvidaré mis lágrimas. Mis labios trazarán en ti el camino a la gloria y morderé cada suspiro tuyo para hacerlo mío. Y será cuando apoye mi pecho contra el tuyo que nuestros corazones bailen juntos, al son de la música que emana de cada rincón de tu pasión y de la mía. Absorberé cada uno de tus espasmos amorosos para sentirte nadar en mis entrañas mientras te abrazo con mis caderas. Y sabré que existe el paraíso cuando nuestros cuerpos sean sólo uno, cuando toda tu esencia se deshaga en mí, como yo me deshago en ti inmersos en sudores y placer.Si me llamas con tu deseo, si solo me observas, serán nuestros sueños quienes me den las alas para seguir viviendo...
viernes, 27 de noviembre de 2009
miércoles, 25 de noviembre de 2009
martes, 24 de noviembre de 2009
TODO MUY CLARO
Hoy vi nacer una flor y vi caer un arbol…
vi como el rio siguio su curso hasta el oceano,
vi como todo cerro y todo quedo tan claro,
No pude más que reir de lo estipulado
aunque paresca un cuento oscuro.
No pude mas que reir de lo estipulado
parece un cuento oscuro.
La flor, un ángel que vino directo del cielo
el árbol que se cayo, fue el hombre que aprovecho
y regreso en ese vuelo;
ahí todo cerro y todo quedo tan claro
vi como el rio siguió su curso.
No pude mas que reir de lo estipulado
parece un cuento oscuro
aveces la sorpresa te toma por sorpresa, aveces…aveces.
guatusi
LULA
Lula lloraba piedras de rubí,
tan saladas como lagrimas;
ellas se quedaron para siempre a vivir
como tatuadas en su cara.
Era una persona medio loca,
como vos, como yo, como cualquiera.T
enia bastantes años sobre este mundo,
pero igual me vio y no supo que decir;
Sus ojos me miraban con esa expresión,
esa redondez y esas lágrimas.
No te preocupes le dije yo,
no te sientas mal por mi,
que en este puzzle que nos da la vida para resolver
no preciso piernas para andar,
no hacen falta ojos para ver.
Y usando solo el diez por cien de mi cerebro escaso
me sobra la mente para saber que a todos nos falta un pedazo, a todos…
que no lo trajimos al venir,
o que un amor se lo robo,
o un hijo de puta nos violo,
o lo perdimos por ahí,
y el que no aprende a vivir asi
se queda como Lula
que lloraba piedras de rubí
viernes, 20 de noviembre de 2009
Una y otra vez, y una vez más
Quisiera viajar por las vacías horas de esta existencia, visitarme desde arriba
Y verme como soy de lejos para saber, porque la vida duele, porque
Me desarmo en cada trozo de mi cuerpo y siento llorar la carne que abrigó
Una esperanza, en el amor
Quisiera esconderme en las tinieblas, tapar mis ojos y mi rostro,
Sentirme fantasma con segundos de vida en medio de este mundo que lastima,
con su crueldad infinita y no ver, no escuchar las voces de quienes, no sienten hablar, ni sienten sentir....
sin brújula, sin norte, sin caminos definidos, sin soñar futuros quiero seguir, viviendo
presentes confusos, pero míos.... me miento a mí para no ver lo que sucede...no sé que sucede...pero ansió vivir...sacar la mascara...abrir los ojos...
Quisiera poder aprender a que no me perturben los silencios, a no escuchar las
Palabras a las que no encuentro en mi diccionario , quisiera envolverme en tempestades
De letras, de palabras mudas , de besos y abrazos.. de manos y de pieles sin misteriosos cuestionamientos..
Quisiera que me sacudas las ideas grises de mi ser ,haciendo que caiga desde donde estoy observándome, a la realidad ..
pero sostenida por tus brazos....abrazada....sostenida...es como pedir demasiado
O seria como no pedir...no pido..ni espero....ahora ya ni hablo..ni pienso.
Y en esta espera sin espera, me visto de duelo confusa y efímera
jueves, 19 de noviembre de 2009
miércoles, 18 de noviembre de 2009
lunes, 16 de noviembre de 2009
Nocturno...
NOCTURNO
. . . Fuera, la noche en veste de tragedia solloza
Como una enorme viuda pegada á mís cristales.
. . .Mi cuarto:...
Por un bello milagro de la luz y del fuego
Mi cuarto es una gruta de oro y gemas raras:
Tiene un musgo tan suave, tan hondo de tapices,
Y es tan vívida y cálida tan dulce que me creo
Dentro de un corazón...
Mi lecho que está en blanco es blanco y vaporoso
Como flor de inocencia,
Como espuma de vicio!
. . . Esta noche hace insomnio;
Hay noches negras, negras, que llevan en la frente
Una rosa de sol...
En estas noches negras y claras no se duerme.
. . . Y yo te amo, Invierno!
Yo te imagino viejo,
Yo te imagino sabio,
Con un divino cuerpo de mármol palpitante
Que arrastra como un manto regio el peso del Tiempo...
Invierno, yo te amo y soy la primavera...
Yo sonroso, tú nievas:
Tú porque todo sabes,
Yo porque todo sueño...
...Amémosnos por eso!...
. . . Sobre mi lecho en blanco,
Tan blanco y vaporoso como flor de inocencia,
Como espuma de vicio,
Invierno, Invierno, Invierno,
Caígamos en un ramo de rosas y de lirios !
fiera de amor
FIERA DE AMOR
. . .Fiera de amor, yo sufro hambre de corazones.
De palomos, de buitres, de corzos ó leones,
No hay manjar que más tiente, no hay más grato sabor,
Había ya estragado mis garras y mi instinto,
Cuando erguida en la casi ultratierra de un plinto,
Me deslumbró una estatua de antiguo emperador.
.
. . .Y crecí de entusiasmo; por el tronco de piedra
Ascendió mi deseo como fulmínea hiedra
Hasta el pecho, nutrido en nieve al parecer;
Y calmé al imposible corazón... la escultura
Su gloria custodiaba serenísima y pura,
Con la frente en Mañana y la planta en Ayer.
.
. . .Perenne mi deseo, en el tronco de piedra
Ha quedado prendido como sangrienta hiedra;
Y desde entonces muerdo soñando un corazón
De estatua, presa suma para mi garra bella;
No es ni carne ni mármol: una pasta de estrella
Sin sangre, sin calor y sin palpitación...
.
. . .Con la esencia de una sobrehumana pasión!
te cuento de Delmira...
Esbozo biografico
“Fiera de amor, yo sufro hambre de corazones de palomos, de buitres, de corzos o leones” rugía la uruguaya delmira agustini y estremecía con su poesía erótica a toda la burguesa sociedad rioplatense de 1900.
Muy lejos de cualquier estereotipo, La Fiera venía en el envase de una joven rubia, de ojos claros, menuda y suave “como un angel encarnado, lleno de encanto e inocencia” según los dichos de sus contemporáneos.Era la hija mimada de Santiago Agustini y María Murtfeldt, una acomodada familia de Montevideo que se enorgullecía de esa niña buena y obediente, sencilla, recatada y dulce.Superdotada en lírica, Delmira comenzó a componer versos a los diez años y recibió de sus padres la instrucción básica y clases privadas de francés, pintura y música, en un ambiente de cariño e idolatría hacia sus condiciones naturales.En lo exterior era la perfecta señorita consentida de principios de siglo. Pero fue en su interior erótico y trágico, donde Agustini encontró su “Safo”, rompió con la clausura del pudor impuesto a la voz femenina, y se convirtió en la poetisa más destacada del Modernismo.
“De todas las mujeres que hoy escriben en verso, ninguna ha impresionado mi ánimo como Delmira Agustini...es la primera vez que en lengua castellana aparece un alma femenina en el orgullo de su inocencia y de su amor...Ruben Dario
Por las noches Delmira era una verdadera sacerdotisa de Eros. Escribía en un estado de hiperestesia, poemas de la más apasionada sensualidad y sexualidad, como ninguna mujer del mundo hispano antes que ella. Y por supuesto, dejaba perplejos y pasmados a todos sus contemporáneos, menos a su sobreprotectora madre y al padre, quien se encargaba de pasar en limpio y ordenar la poesía de su hija, con letra impecable y caligráfica.
“Delmira Agustini escribía en trance. Había cantado a las fiebres del amor sin pacatos disimulos, y había sido condenada por quienes castigan en las mujeres lo que en los hombres aplauden, porque la castidad es un deber femenino y el deseo, como la razón, un privilegio masculino…”Eduardo Galeano
Pero a pesar de su extremado erotismo, esta Fiera no había conocido el verdadero amor. Y cuando Enrique Job Reyes, un noble negociante de ganado caballar llegó a su vida, Delmira, lo elevó hasta la cúspide de sus fantasías.Se casaron un 14 de agosto de 1913 y antes de cumplir un mes y medio de la boda, La mujer abandonaba al flamante marido y se refugiaba en la casa paterna diciendo que estaba “huyendo de tanta vulgaridad”.Algunos dijeron que se había enamorado del escritor argentino Manuel Ugarte, con quien se escribía y solía ver en Montevideo. Pero lo cierto es que apenas entabló la demanda de divorcio, Delmira comenzó a frecuentar a su marido como amante, frecuentemente y en distintos hoteles. Quizás en ese amor clandestino y misterioso, sus gritos encendidos de bacante y su voluptuosidad encontraran la satisfacción que el matrimonio le había negado.En la tarde del 6 de julio de 1914, Delmira acudió a una última cita de amor con su ex-marido en una habitación alquilada. “Para mi vida hambrienta, eres la presa única” había escrito, pero nunca sabremos si Reyes fue o no su presa.En esa cita el hombre asesinó a La Fiera con dos balazos y luego se suicidó.
“Yo muero extrañamente...No me mata la Vida, No me mata la Muerte, no me mata el Amor; Muero de un pensamiento mudo como una herida”.Delmira Agustini.1886-1914
Enlaces de interés:Poemas: http://www.poesiaspoemas.com/delmira-agustini
te cuento de ...
Esbozo biografico
"James Joyce y la pesadilla de la historia"
Por Andrés Pérez Simón
El autor de Ulises, la obra que marcó un antes y un después en la literatura del siglo XX, tuvo que vivir su particular odisea para crecer como artista y permanecer alejado de las tumultuosas circunstancias políticas que siempre lo rodearon. James Joyce, nacido en Dublín en el año 1882, vivió muy de cerca el movimiento nacionalista irlandés, pero le bastó muy poco tiempo para darse cuenta de que la política suponía el mayor peligro para sus ambiciones literarias. Con sólo nueve años de edad, Joyce escribió un poema titulado Et tu, Healy, en el que acusaba al nacionalista Tim Healy de conspirar con el clero para provocar la caída de Charles Stuart Parnell. A pesar de su corta edad, Joyce ya había encontrado la palabra con la que se referiría durante toda su vida a las intrigas por el poder en Irlanda: traición.En la década de los 70, Parnell trabajó para bloquear sistemáticamente las decisiones de la Casa de los Comunes y, con ello, despertar la atención en Londres sobre la cuestión irlandesa. El Partido Irlandés, formación que encabezaba y que estaba integrada exclusivamente por protestantes como él -los católicos no podían participar en política- logró que el gobierno central tomara en cuenta sus reivindicaciones en torno a un estatuto de autonomía (Home Rule). En 1886, el Primer Ministro William Gladstone, del Partido Liberal, sometió a votación el proyecto, que resultó finalmente rechazado. Recordando esta época de la política nacional, Joyce siempre pensó que la toma en consideración del Home Rule no fue sino una maniobra calculada por Gladstone para ganar tiempo y simpatías en Dublín, lo que quedó demostrado tras el fallido intento del Partido Liberal para incorporar a Parnell a sus filas. En 1889, al trascender públicamente la relación amorosa del político con una mujer casada, el Ejecutivo inglés utilizó la situación para situar al Partido Irlandés ante la tesitura de elegir entre el carismático líder y la aprobación del Home Rule. La iglesia católica, que había perdido peso en la política irlandesa ante la emergente figura de Parnell, aprovechó el escándalo para promover su condena política. En 1891, dos años después de su caída, el depuesto líder murió en Dublín.No se conserva el poema que Joyce escribió siendo un niño, pero sí hay constancia documental de su posicionamiento ante el fenómeno nacionalista en sus años de juventud. Durante su estancia en la universidad, asistió al nacimiento y desarrollo de un movimiento literario con ambiciones de cimentarse sobre una identidad específicamente irlandesa. En 1892, el poeta William Butler Yeats había fundado la Sociedad Literaria Nacional, con el objetivo de ‘purificar’ Irlanda de cualquier manifestación inglesa en el arte. Un año después apareció la Liga Gaélica, de gran arraigo entre los estudiantes de final de siglo, si bien fue precisamente James Joyce uno de los pocos que no se adhirieron a ella bajo la premisa de salvaguardar ante todo su independencia artística. En 1901 pagó de su propio bolsillo un panfleto en el que, bajo el título de El día del populacho, criticaba el provincianismo a la hora de escoger obras de teatro: Yeats anteponía la exaltación de lo irlandés en lugar de ampliar horizontes con autores que, en opinión de Joyce, podían “acercar Irlanda a Europa”. En Stephen Hero, borrador de Retrato del artista adolescente, Joyce transcribió las críticas recibidas por su rechazo al fomento de una literatura nacionalista: “Un hombre que se dice de todos los países en realidad no tiene ninguno. Antes de tu arte, debes contar con una nación”, le reprochaban a Stephen Dedalus, alter ego del autor en lo referido a cuestiones estéticas. El personaje de Dedalus reaparecería después en el citado Retrato y en Ulises, su obra más conocida.Exilio en la Europa continental Joyce marchó hacia París en 1902 para huir de las redes que le impedían desarrollarse como artista: nacionalidad, lengua y religión. Su estancia en la capital francesa apenas se prolongó unos meses, ya que tuvo que volver a Dublín por la muerte de su madre, ante quien se negó a rezar por su alma en sus últimos estertores. Joyce tenía claro que no debía capitular ante un catolicismo que impregnaba toda manifestación vital y artística, por lo que en 1904 abandonó definitivamente Irlanda junto a Nora Barnacle, una joven a la que había conocido hacía poco tiempo y con la que compartiría el resto de su vida. La pareja se instaló en Trieste, por entonces ciudad del Imperio Austro-Húngaro, donde Joyce pudo malvivir impartiendo clases de inglés. Pero Irlanda nunca abandonó al escritor, quien eligió Dublín como espacio de sus tres obras más famosas. Entre 1904 y 1907 escribió la colección de relatos Dublineses, estampas que reflejaban la sensación de inmovilidad que le atenazaba en la capital irlandesa. En una carta a su editor explicaba: “Mi intención era escribir un capítulo de la historia moral de mi país y escogí como escenario Dublín porque esa ciudad me parecía el centro de la parálisis”. Nadie quería imprimir la obra porque la censura afectaba a editores e impresores, pero Joyce se negó a rectificar su supuesto lenguaje blasfemo e inmoral porque, para él, eso suponía una traición a su empeño de reflejar la realidad de la nación. Siete años después de terminar Dublineses, Joyce pudo ver publicada su primera obra en prosa y, paradójicamente, no fue impresa en Dublín sino en Londres. Las ‘blasfemas’ alusiones a la Iglesia Católica y la aparición de numerosos personajes reales en los relatos hacían imposible la distribución de esta obra en la ciudad que lo vio nacer.Durante sus años en Trieste, en los que terminó la redacción de Dublineses, transformó Stephen Hero en Retrato del artista adolescente y se propuso iniciar Ulises, Joyce hizo gala de un socialismo sui géneris: el Estado debería subvencionar a los escritores que, como él, pasaban hambre en el mundo capitalista. Joyce, según su primer biógrafo, había abandonado El Capital tras leer la primera línea, que le pareció absurda. Su particular socialismo era más una reacción a la jerarquía eclesiástica que un sincero posicionamiento político.Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, Joyce se negó a abandonar Trieste, ciudad en la que había vivido casi sin interrupción desde 1907 y en la que habían nacido sus hijos Giorgio y Lucia. Sólo a finales de 1915 se trasladó con su familia a Zurich, en la neutral Suiza, tras comprometerse el escritor con las autoridades austriacas a no tomar parte en la contienda. No le costó demasiado cumplir con su palabra, pues estaba demasiado ocupado en gestionar la publicación de sus escritos y en pagar sus excesivos gastos en los bulliciosos cafés literarios. Tras su regreso a Trieste en 1919, que pasó a ser territorio italiano tras la desmembración de Austria-Hungría, respondía así a los conocidos que le preguntaban sobre cómo había vivido la Primera Guerra Mundial. “Ah, sí, me dijeron que había una guerra en Europa”.Pese a su aparente desdén, lo cierto es que la Gran Guerra había condicionado la situación política de Irlanda hasta el punto de interesar notablemente al escritor. En diciembre de 1914, poco antes de la restricción de la libertad de prensa por lo excepcional del periodo, el Sinn Fein había hecho públicas sus tesis acerca del conflicto. Para los nacionalistas irlandeses, era Inglaterra la que estaba en guerra, y no Irlanda, ya que ésta última no contaba con una Constitución o un Gobierno a los que defender. Aunque decía detestar enormemente la política, lo cierto es que la cuestión nacional nunca había dejado de preocupar a Joyce, como probaron los artículos favorables al Sinn Fein que publicó antes de la guerra en Trieste. Coincidiendo con el conflicto bélico tuvo lugar en Dublín el conocido como Levantamiento de Pascua, en 1916, que se saldó con la ejecución de cientos de nacionalistas irlandeses, entre ellos un viejo amigo de Joyce que trataba de impedir las matanzas por parte del ejército británico. Esta muerte afectó profundamente a un Joyce que, durante sus años en la neutral Suiza, llegó a odiar más que nunca a la corona británica. Tuvo frecuentes discusiones con el consulado y sus malas relaciones con los diplomáticos ingleses le hicieron correr el riesgo de ser llamado a filas.Por su situación personal y su posicionamiento ideológico, no resulta extraño que Joyce mostrara una gran alegría cuando el gobierno de Londres dejó de reclutar irlandeses para la Gran Guerra. Pero su identificación con el movimiento nacionalista, siempre desde la distancia, se atemperó tras terminar la contienda. Rechazaba el emergente patriotismo mientras preguntaba: “¿Moriría Irlanda por mí?”. En la misma línea provocadora, se consideraba a sí mismo como un héroe de la Primera Guerra Mundial por haber escrito Ulises.El reconocimiento de Irlanda como Estado Libre, en diciembre de 1921, no despertó en Joyce ningún interés por regresar a una tierra que no había pisado desde 1912. Con estas palabras zanjó para siempre su posición ante sus orígenes: “No serviré por más tiempo a aquello en lo que no creo, llámese mi hogar, mi patria o mi religión. Y trataré de expresarme de algún modo en vida y arte, tan libremente como me sea posible”. Eran palabras pronunciadas por Stephen Dedalus en Retrato del artista adolescente, novela publicada a finales de 1916 gracias a su creciente reputación en los círculos literarios de Francia y EEUU. Entre 1918 y 1920 se publicaron capítulos de Ulises por entregas en una revista norteamericana, pero la Sociedad para la Prevención del Vicio en Nueva York puso en marcha un proceso al considerar los textos inmorales y obscenos. En 1921 se prohibió la entrada del libro, de aparición inminente, en Estados Unidos, a pesar de los argumentos del editor y abogado John Quinn, quien mantenía que se trataba de una obra tan oscura e inaccesible que no podría escandalizar a nadie.Completamente dedicado a la mastodóntica obra que era Ulises, Joyce no encontraba en Trieste el ambiente ideal para conseguir la celebridad literaria a la que aspiraba, por lo que en 1920 decidió dejar la ciudad, a la que había vuelto tras su paréntesis obligado en Zürich. En un principio pensó instalarse en Londres, ciudad en la que los editores le habían dispensado un trato literario infinitamente más amable que en la provinciana Dublín. Lo que verdaderamente le importaba, y a lo que consagró toda su vida, era alcanzar la libertad artística, como proclamaba Stephen Dedalus en el Retrato. Antes de marchar a Londres prefirió visitar París para conocer a escritores y editores, pero lo que pretendía ser una estancia de dos semanas terminó prolongándose hasta 1939, fecha en la que el escritor y su familia se vieron forzados a abandonar la capital francesa a consecuencia del estallido de la Segunda Guerra Mundial.James Joyce consiguió ver publicado Ulises en Francia gracias al empeño personal de la norteamericana Sylvia Beach, dueña de una librería y ferviente admiradora de una novela que no encontraba editor en las islas británicas. La primera edición de Ulises apareció en París el día del cuarenta cumpleaños de su autor (2 de febrero de 1922). Antes de que el libro fuera admitido en Estados Unidos en 1933, después de un fallo judicial histórico para la literatura del siglo XX, ya circulaban traducciones al alemán, francés, checo y japonés. En 1936 se autorizó su publicación en Gran Bretaña y, como para dar la razón a Joyce aun después de su muerte en 1942, Irlanda fue uno de los últimos países en reconocer su innovadora novela: Ulises fue un título proscrito hasta bien entrados los sesenta. Tras el fin de la Guerra Civil irlandesa en 1923, tanto las instituciones como la prensa se dedicaron a promover una literatura nacional sustentada en el carácter católico de la nación. Aunque se pretendió recuperar a Joyce para la causa, era del todo imposible situar el experimentalismo estilístico de Ulises dentro del realismo, norma estética que, al igual que en la España posterior a 1939, regía la producción literaria. El nuevo Estado irlandés exigía unas letras respetuosas con un catolicismo que definía la identidad nacional en oposición al anglicanismo, pero el James Joyce que empezaba a gozar de fama en París no tenía motivo alguno para someterse a los dictados oficiales de la patria.La Segunda Guerra MundialEn la década de los 30 circularon en diversas revistas de Europa y EE UU fragmentos de lo que luego sería Finnegans Wake, la última obra de Joyce. El auge del fascismo en Europa enturbiaba cada vez más los círculos literarios muy a pesar del autor irlandés, siempre reticente a mezclar política y literatura. Cuando en 1936 le enviaron un cuestionario sobre la Guerra Civil se negó a contestar alegando: “Eso es política. La política se está metiendo en todas partes ahora”. En reuniones con escritores en París, después de haber accedido Hitler al poder en Alemania, solía alabar la capacidad del Führer para conducir a las masas. Pero sus burlescas loas no iban más allá del deseo de ridiculizar las ideologías y los nacionalismos, pues siempre fue Joyce consciente de la terrible realidad nazi: desde 1938 ayudó a conocidos y amigos judíos a huir hacia Irlanda y EE UU.En 1939 apareció Finnegans Wake, un eterno juego de palabras a partir de la teoría del filósofo italiano Giambattista Vico sobre la circularidad de la historia. La repercusión del libro, debido a la turbulenta situación política, fue mínima. Este hecho desagradó enormemente a Joyce quien, más en serio que en broma, llegó a acusar a los gobiernos de haber iniciado la Segunda Guerra Mundial con tal de impedir la lectura de su obra. En agosto de 1938, el escritor había abandonado París, pero después de tres meses en Lausana prefirió hacer caso omiso de lo que se avecinaba tras la crisis de los Sudetes y volvió a París para terminar Finnegans Wake. El 3 de septiembre de 1939 estalló la guerra y Joyce, refugiado entonces en la ciudad de La Barcle, no pudo tener con él a su hija Lucia, que permanecía ingresada en un psiquiátrico de la capital francesa. En el pueblo de Pornichet logró reunir a su mujer, a Lucia y a su hijo Giorgio -éste último en edad de combatir- y finalmente huyeron a Zurich en septiembre de 1940, tres meses después de la ocupación de París. El destino quiso que Joyce se refugiara en la misma ciudad a la que tuvo que acudir tras el inicio de la Primera Guerra Mundial, si bien esta vez contó con muchos más problemas: a la dramática situación de su hija, con graves trastornos psíquicos, se unió la oposición de las autoridades de la Francia ocupada, que lo acusaban de ser judío (como el personaje Leopold Bloom en Ulises). Los testimonios que Joyce pudo recoger en Lausana y en Zurich lo salvaron de ser detenido. Su mejor amigo en París y compañero en la huida de 1939, Paul Léon, decidió volver a París a pesar de la ocupación. Logró salvar documentos personales de Joyce y los hizo llegar al embajador irlandés con la orden de depositarlos en la Biblioteca Nacional de Dublín. Léon, que sí era judío, fue detenido y ejecutado un año después. Zurich, por su condición de ciudad neutral, era el único lugar en Europa en el que un esteta como Joyce podía vivir sus últimos días. En 1941, unos pocos meses después de llegar desde Francia, una úlcera perforada le produjo la muerte. En Irlanda, la prensa nacionalista se hizo amplio eco de su muerte y reivindicó al escritor como ejemplo de ortodoxia nacional. Remitiéndose a una hermana con la que el autor apenas mantenía relación, el conservador diario “Irish Press” destacó el amor de Joyce por las gentes de Dublín y, algo aún más dudoso, el fervor con el que el escritor siguió la Semana Santa durante su estancia en Italia. Hoy día, Joyce es el orgullo de una nación que lo forzó a exiliarse para desarrollar su proyecto artístico. Basta un ejemplo de este uso político de su figura: hace apenas unos meses, miembros del Sinn Fein se fotografiaron junto a una estatua en su memoria para hacer campaña en contra del Tratado de Niza. Oprimido por el catolicismo en Dublín, acosado por dos guerras mundiales en la Europa continental y reconvertido a la causa irlandesa tras su muerte, sólo las palabras de Stephen Dedalus en Ulises pueden mostrarnos al verdadero James Joyce: “La historia es una pesadilla de la que intento despertar”.
"James Joyce y la pesadilla de la historia"
Por Andrés Pérez Simón
El autor de Ulises, la obra que marcó un antes y un después en la literatura del siglo XX, tuvo que vivir su particular odisea para crecer como artista y permanecer alejado de las tumultuosas circunstancias políticas que siempre lo rodearon. James Joyce, nacido en Dublín en el año 1882, vivió muy de cerca el movimiento nacionalista irlandés, pero le bastó muy poco tiempo para darse cuenta de que la política suponía el mayor peligro para sus ambiciones literarias. Con sólo nueve años de edad, Joyce escribió un poema titulado Et tu, Healy, en el que acusaba al nacionalista Tim Healy de conspirar con el clero para provocar la caída de Charles Stuart Parnell. A pesar de su corta edad, Joyce ya había encontrado la palabra con la que se referiría durante toda su vida a las intrigas por el poder en Irlanda: traición.En la década de los 70, Parnell trabajó para bloquear sistemáticamente las decisiones de la Casa de los Comunes y, con ello, despertar la atención en Londres sobre la cuestión irlandesa. El Partido Irlandés, formación que encabezaba y que estaba integrada exclusivamente por protestantes como él -los católicos no podían participar en política- logró que el gobierno central tomara en cuenta sus reivindicaciones en torno a un estatuto de autonomía (Home Rule). En 1886, el Primer Ministro William Gladstone, del Partido Liberal, sometió a votación el proyecto, que resultó finalmente rechazado. Recordando esta época de la política nacional, Joyce siempre pensó que la toma en consideración del Home Rule no fue sino una maniobra calculada por Gladstone para ganar tiempo y simpatías en Dublín, lo que quedó demostrado tras el fallido intento del Partido Liberal para incorporar a Parnell a sus filas. En 1889, al trascender públicamente la relación amorosa del político con una mujer casada, el Ejecutivo inglés utilizó la situación para situar al Partido Irlandés ante la tesitura de elegir entre el carismático líder y la aprobación del Home Rule. La iglesia católica, que había perdido peso en la política irlandesa ante la emergente figura de Parnell, aprovechó el escándalo para promover su condena política. En 1891, dos años después de su caída, el depuesto líder murió en Dublín.No se conserva el poema que Joyce escribió siendo un niño, pero sí hay constancia documental de su posicionamiento ante el fenómeno nacionalista en sus años de juventud. Durante su estancia en la universidad, asistió al nacimiento y desarrollo de un movimiento literario con ambiciones de cimentarse sobre una identidad específicamente irlandesa. En 1892, el poeta William Butler Yeats había fundado la Sociedad Literaria Nacional, con el objetivo de ‘purificar’ Irlanda de cualquier manifestación inglesa en el arte. Un año después apareció la Liga Gaélica, de gran arraigo entre los estudiantes de final de siglo, si bien fue precisamente James Joyce uno de los pocos que no se adhirieron a ella bajo la premisa de salvaguardar ante todo su independencia artística. En 1901 pagó de su propio bolsillo un panfleto en el que, bajo el título de El día del populacho, criticaba el provincianismo a la hora de escoger obras de teatro: Yeats anteponía la exaltación de lo irlandés en lugar de ampliar horizontes con autores que, en opinión de Joyce, podían “acercar Irlanda a Europa”. En Stephen Hero, borrador de Retrato del artista adolescente, Joyce transcribió las críticas recibidas por su rechazo al fomento de una literatura nacionalista: “Un hombre que se dice de todos los países en realidad no tiene ninguno. Antes de tu arte, debes contar con una nación”, le reprochaban a Stephen Dedalus, alter ego del autor en lo referido a cuestiones estéticas. El personaje de Dedalus reaparecería después en el citado Retrato y en Ulises, su obra más conocida.Exilio en la Europa continental Joyce marchó hacia París en 1902 para huir de las redes que le impedían desarrollarse como artista: nacionalidad, lengua y religión. Su estancia en la capital francesa apenas se prolongó unos meses, ya que tuvo que volver a Dublín por la muerte de su madre, ante quien se negó a rezar por su alma en sus últimos estertores. Joyce tenía claro que no debía capitular ante un catolicismo que impregnaba toda manifestación vital y artística, por lo que en 1904 abandonó definitivamente Irlanda junto a Nora Barnacle, una joven a la que había conocido hacía poco tiempo y con la que compartiría el resto de su vida. La pareja se instaló en Trieste, por entonces ciudad del Imperio Austro-Húngaro, donde Joyce pudo malvivir impartiendo clases de inglés. Pero Irlanda nunca abandonó al escritor, quien eligió Dublín como espacio de sus tres obras más famosas. Entre 1904 y 1907 escribió la colección de relatos Dublineses, estampas que reflejaban la sensación de inmovilidad que le atenazaba en la capital irlandesa. En una carta a su editor explicaba: “Mi intención era escribir un capítulo de la historia moral de mi país y escogí como escenario Dublín porque esa ciudad me parecía el centro de la parálisis”. Nadie quería imprimir la obra porque la censura afectaba a editores e impresores, pero Joyce se negó a rectificar su supuesto lenguaje blasfemo e inmoral porque, para él, eso suponía una traición a su empeño de reflejar la realidad de la nación. Siete años después de terminar Dublineses, Joyce pudo ver publicada su primera obra en prosa y, paradójicamente, no fue impresa en Dublín sino en Londres. Las ‘blasfemas’ alusiones a la Iglesia Católica y la aparición de numerosos personajes reales en los relatos hacían imposible la distribución de esta obra en la ciudad que lo vio nacer.Durante sus años en Trieste, en los que terminó la redacción de Dublineses, transformó Stephen Hero en Retrato del artista adolescente y se propuso iniciar Ulises, Joyce hizo gala de un socialismo sui géneris: el Estado debería subvencionar a los escritores que, como él, pasaban hambre en el mundo capitalista. Joyce, según su primer biógrafo, había abandonado El Capital tras leer la primera línea, que le pareció absurda. Su particular socialismo era más una reacción a la jerarquía eclesiástica que un sincero posicionamiento político.Tras el estallido de la Primera Guerra Mundial, Joyce se negó a abandonar Trieste, ciudad en la que había vivido casi sin interrupción desde 1907 y en la que habían nacido sus hijos Giorgio y Lucia. Sólo a finales de 1915 se trasladó con su familia a Zurich, en la neutral Suiza, tras comprometerse el escritor con las autoridades austriacas a no tomar parte en la contienda. No le costó demasiado cumplir con su palabra, pues estaba demasiado ocupado en gestionar la publicación de sus escritos y en pagar sus excesivos gastos en los bulliciosos cafés literarios. Tras su regreso a Trieste en 1919, que pasó a ser territorio italiano tras la desmembración de Austria-Hungría, respondía así a los conocidos que le preguntaban sobre cómo había vivido la Primera Guerra Mundial. “Ah, sí, me dijeron que había una guerra en Europa”.Pese a su aparente desdén, lo cierto es que la Gran Guerra había condicionado la situación política de Irlanda hasta el punto de interesar notablemente al escritor. En diciembre de 1914, poco antes de la restricción de la libertad de prensa por lo excepcional del periodo, el Sinn Fein había hecho públicas sus tesis acerca del conflicto. Para los nacionalistas irlandeses, era Inglaterra la que estaba en guerra, y no Irlanda, ya que ésta última no contaba con una Constitución o un Gobierno a los que defender. Aunque decía detestar enormemente la política, lo cierto es que la cuestión nacional nunca había dejado de preocupar a Joyce, como probaron los artículos favorables al Sinn Fein que publicó antes de la guerra en Trieste. Coincidiendo con el conflicto bélico tuvo lugar en Dublín el conocido como Levantamiento de Pascua, en 1916, que se saldó con la ejecución de cientos de nacionalistas irlandeses, entre ellos un viejo amigo de Joyce que trataba de impedir las matanzas por parte del ejército británico. Esta muerte afectó profundamente a un Joyce que, durante sus años en la neutral Suiza, llegó a odiar más que nunca a la corona británica. Tuvo frecuentes discusiones con el consulado y sus malas relaciones con los diplomáticos ingleses le hicieron correr el riesgo de ser llamado a filas.Por su situación personal y su posicionamiento ideológico, no resulta extraño que Joyce mostrara una gran alegría cuando el gobierno de Londres dejó de reclutar irlandeses para la Gran Guerra. Pero su identificación con el movimiento nacionalista, siempre desde la distancia, se atemperó tras terminar la contienda. Rechazaba el emergente patriotismo mientras preguntaba: “¿Moriría Irlanda por mí?”. En la misma línea provocadora, se consideraba a sí mismo como un héroe de la Primera Guerra Mundial por haber escrito Ulises.El reconocimiento de Irlanda como Estado Libre, en diciembre de 1921, no despertó en Joyce ningún interés por regresar a una tierra que no había pisado desde 1912. Con estas palabras zanjó para siempre su posición ante sus orígenes: “No serviré por más tiempo a aquello en lo que no creo, llámese mi hogar, mi patria o mi religión. Y trataré de expresarme de algún modo en vida y arte, tan libremente como me sea posible”. Eran palabras pronunciadas por Stephen Dedalus en Retrato del artista adolescente, novela publicada a finales de 1916 gracias a su creciente reputación en los círculos literarios de Francia y EEUU. Entre 1918 y 1920 se publicaron capítulos de Ulises por entregas en una revista norteamericana, pero la Sociedad para la Prevención del Vicio en Nueva York puso en marcha un proceso al considerar los textos inmorales y obscenos. En 1921 se prohibió la entrada del libro, de aparición inminente, en Estados Unidos, a pesar de los argumentos del editor y abogado John Quinn, quien mantenía que se trataba de una obra tan oscura e inaccesible que no podría escandalizar a nadie.Completamente dedicado a la mastodóntica obra que era Ulises, Joyce no encontraba en Trieste el ambiente ideal para conseguir la celebridad literaria a la que aspiraba, por lo que en 1920 decidió dejar la ciudad, a la que había vuelto tras su paréntesis obligado en Zürich. En un principio pensó instalarse en Londres, ciudad en la que los editores le habían dispensado un trato literario infinitamente más amable que en la provinciana Dublín. Lo que verdaderamente le importaba, y a lo que consagró toda su vida, era alcanzar la libertad artística, como proclamaba Stephen Dedalus en el Retrato. Antes de marchar a Londres prefirió visitar París para conocer a escritores y editores, pero lo que pretendía ser una estancia de dos semanas terminó prolongándose hasta 1939, fecha en la que el escritor y su familia se vieron forzados a abandonar la capital francesa a consecuencia del estallido de la Segunda Guerra Mundial.James Joyce consiguió ver publicado Ulises en Francia gracias al empeño personal de la norteamericana Sylvia Beach, dueña de una librería y ferviente admiradora de una novela que no encontraba editor en las islas británicas. La primera edición de Ulises apareció en París el día del cuarenta cumpleaños de su autor (2 de febrero de 1922). Antes de que el libro fuera admitido en Estados Unidos en 1933, después de un fallo judicial histórico para la literatura del siglo XX, ya circulaban traducciones al alemán, francés, checo y japonés. En 1936 se autorizó su publicación en Gran Bretaña y, como para dar la razón a Joyce aun después de su muerte en 1942, Irlanda fue uno de los últimos países en reconocer su innovadora novela: Ulises fue un título proscrito hasta bien entrados los sesenta. Tras el fin de la Guerra Civil irlandesa en 1923, tanto las instituciones como la prensa se dedicaron a promover una literatura nacional sustentada en el carácter católico de la nación. Aunque se pretendió recuperar a Joyce para la causa, era del todo imposible situar el experimentalismo estilístico de Ulises dentro del realismo, norma estética que, al igual que en la España posterior a 1939, regía la producción literaria. El nuevo Estado irlandés exigía unas letras respetuosas con un catolicismo que definía la identidad nacional en oposición al anglicanismo, pero el James Joyce que empezaba a gozar de fama en París no tenía motivo alguno para someterse a los dictados oficiales de la patria.La Segunda Guerra MundialEn la década de los 30 circularon en diversas revistas de Europa y EE UU fragmentos de lo que luego sería Finnegans Wake, la última obra de Joyce. El auge del fascismo en Europa enturbiaba cada vez más los círculos literarios muy a pesar del autor irlandés, siempre reticente a mezclar política y literatura. Cuando en 1936 le enviaron un cuestionario sobre la Guerra Civil se negó a contestar alegando: “Eso es política. La política se está metiendo en todas partes ahora”. En reuniones con escritores en París, después de haber accedido Hitler al poder en Alemania, solía alabar la capacidad del Führer para conducir a las masas. Pero sus burlescas loas no iban más allá del deseo de ridiculizar las ideologías y los nacionalismos, pues siempre fue Joyce consciente de la terrible realidad nazi: desde 1938 ayudó a conocidos y amigos judíos a huir hacia Irlanda y EE UU.En 1939 apareció Finnegans Wake, un eterno juego de palabras a partir de la teoría del filósofo italiano Giambattista Vico sobre la circularidad de la historia. La repercusión del libro, debido a la turbulenta situación política, fue mínima. Este hecho desagradó enormemente a Joyce quien, más en serio que en broma, llegó a acusar a los gobiernos de haber iniciado la Segunda Guerra Mundial con tal de impedir la lectura de su obra. En agosto de 1938, el escritor había abandonado París, pero después de tres meses en Lausana prefirió hacer caso omiso de lo que se avecinaba tras la crisis de los Sudetes y volvió a París para terminar Finnegans Wake. El 3 de septiembre de 1939 estalló la guerra y Joyce, refugiado entonces en la ciudad de La Barcle, no pudo tener con él a su hija Lucia, que permanecía ingresada en un psiquiátrico de la capital francesa. En el pueblo de Pornichet logró reunir a su mujer, a Lucia y a su hijo Giorgio -éste último en edad de combatir- y finalmente huyeron a Zurich en septiembre de 1940, tres meses después de la ocupación de París. El destino quiso que Joyce se refugiara en la misma ciudad a la que tuvo que acudir tras el inicio de la Primera Guerra Mundial, si bien esta vez contó con muchos más problemas: a la dramática situación de su hija, con graves trastornos psíquicos, se unió la oposición de las autoridades de la Francia ocupada, que lo acusaban de ser judío (como el personaje Leopold Bloom en Ulises). Los testimonios que Joyce pudo recoger en Lausana y en Zurich lo salvaron de ser detenido. Su mejor amigo en París y compañero en la huida de 1939, Paul Léon, decidió volver a París a pesar de la ocupación. Logró salvar documentos personales de Joyce y los hizo llegar al embajador irlandés con la orden de depositarlos en la Biblioteca Nacional de Dublín. Léon, que sí era judío, fue detenido y ejecutado un año después. Zurich, por su condición de ciudad neutral, era el único lugar en Europa en el que un esteta como Joyce podía vivir sus últimos días. En 1941, unos pocos meses después de llegar desde Francia, una úlcera perforada le produjo la muerte. En Irlanda, la prensa nacionalista se hizo amplio eco de su muerte y reivindicó al escritor como ejemplo de ortodoxia nacional. Remitiéndose a una hermana con la que el autor apenas mantenía relación, el conservador diario “Irish Press” destacó el amor de Joyce por las gentes de Dublín y, algo aún más dudoso, el fervor con el que el escritor siguió la Semana Santa durante su estancia en Italia. Hoy día, Joyce es el orgullo de una nación que lo forzó a exiliarse para desarrollar su proyecto artístico. Basta un ejemplo de este uso político de su figura: hace apenas unos meses, miembros del Sinn Fein se fotografiaron junto a una estatua en su memoria para hacer campaña en contra del Tratado de Niza. Oprimido por el catolicismo en Dublín, acosado por dos guerras mundiales en la Europa continental y reconvertido a la causa irlandesa tras su muerte, sólo las palabras de Stephen Dedalus en Ulises pueden mostrarnos al verdadero James Joyce: “La historia es una pesadilla de la que intento despertar”.
james joyce
cartas a Nora
2 de diciembre de 190944
Fontenoy Street, Dublín
Querida mía, quizás debo comenzar pidiéndote perdón por la increíble carta que te escribí anoche. Mientras la escribía tu carta reposaba junto a mí, y mis ojos estaban fijos, como aún ahora lo están, en cierta palabra escrita en ella. Hay algo de obsceno y lascivo en el aspecto mismo de las cartas. También su sonido es como el acto mismo, breve, brutal, irresistible y diabólico.Querida, no te ofendas por lo que escribo. Me agradeces el hermoso nombre que te di. ¡Si, querida, "mi hermosa flor silvestre de los setos" es un lindo nombre! ¡Mi flor azul oscuro, empapada por la lluvia! Como ves, tengo todavía algo de poeta. También te regalaré un hermoso libro: es el regalo del poeta para la mujer que ama. Pero, a su lado y dentro de este amor espiritual que siento por ti, hay también una bestia salvaje que explora cada parte secreta y vergonzosa de él, cada uno de sus actos y olores. Mi amor por ti me permite rogar al espíritu de la belleza eterna y a la ternura que se refleja en tus ojos o derribarte debajo de mí, sobre tus suaves senos, y tomarte por atrás, como un cerdo que monta a una puerca, glorificado en la sincera peste que asciende de tu trasero, glorificado en la descubierta vergüenza de tu vestido vuelto hacia arriba y en tus bragas blancas de muchacha y en la confusión de tus mejillas sonrosadas y tu cabello revuelto. Esto me permite estallar en lágrimas de piedad y amor por ti a causa del sonido de algún acorde o cadencia musical o acostarme con la cabeza en los pies, rabo con rabo, sintiendo tus dedos acariciar y cosquillear mis testículos o sentirte frotar tu trasero contra mí y tus labios ardientes chupar mi pija mientras mi cabeza se abre paso entre tus rollizos muslos y mis manos atraen la acojinada curva de tus nalgas y mi lengua lame vorazmente tu sexo rojo y espeso. He pensado en ti casi hasta el desfallecimiento al oír mi voz cantando o murmurando para tu alma la tristeza, la pasión y el misterio de la vida y al mismo tiempo he pensado en ti haciéndome gestos sucios con los labios y con la lengua, provocándome con ruidos y caricias obscenas y haciendo delante de mí el más sucio y vergonzoso acto del cuerpo. ¿Te acuerdas del día en que te alzaste la ropa y me dejaste acostarme debajo de ti para ver cómo lo hacías? Después quedaste avergonzada hasta para mirarme a los ojos.¡Eres mía, querida, eres mía! Te amo. Todo lo que escribí arriba es sólo un momento o dos de brutal locura! La última gota de semen ha sido inyectada con dificultad en tu sexo antes que todo termine y mi verdadero amor hacia ti, el amor de mis versos, el amor de mis ojos, por tus extrañamente tentadores ojos llega soplando sobre mi alma como un viento de aromas. Mi pija está todavía tiesa, caliente y estremecida tras la última, brutal embestida que te ha dado cuando se oye levantarse un himno tenue, de piadoso y tierno culto en tu honor, desde los oscuros claustros de mi corazón.Nora, mi fiel querida, mi pícara colegiala de ojos dulces, sé mi puta, mi amante, todo lo que quieras (¡mi pequeña pajera amante! ¡mi putita folladora!) eres siempre mi hermosa flor silvestre de los setos, mi flor azul oscuro empapada por la lluvia.
JIM
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6 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín.
¡Noretta mía! Esta tarde recibí la conmovedora carta en la que me cuentas que andabas sin ropa interior. El día veinticinco no conseguí las doscientas coronas, sino sólo cincuenta, y otras cincuenta el día primero. Esto es todo en lo que al dinero se refiere. Te envío un pequeño billete de banco y espero que al menos puedas comprarte un lindo par de bragas, y te mandaré más cuando me paguen de nuevo. Me gustaría que usaras bragas con tres o cuatro adornos, uno sobre el otro, desde las rodillas hasta los muslos, con grandes lazos escarlata, es decir, no bragas de colegiala con un pobre ribete de lazo angosto, apretado alrededor de las piernas y tan delgado que se ve la piel entre ellos, sino bragas de mujer (o, si prefieres la palabra) de señora, con los bajos completamente sueltos y perneras anchas, llenos lazos y cintas, y con abundante perfume de modo que las enseñes, ya sea cuando alces la ropa rápidamente o cuando te abrace bellamente, lista para ser amada, pueda ver solamente la ondulación de una masa de telas y así cuando me recueste encima de ti para abrirlos y darte un beso ardiente de deseo en tu indecente trasero desnudo, pueda oler el perfume de tus bragas tanto como el caliente olor de tu sexo y el pesado aroma de tu trasero.Te habrán impresionado las cosas sucias que te escribo. Quizás pienses que mi amor es una cosa sucia. Lo es, querida, en algunos momentos. Te sueño a veces en posiciones obscenas. Imagino cosas muy sucias, que no escribiré hasta que vea qué es lo que tú me escribes. Los más insignificantes detalles me producen una gran erección. Un movimiento lascivo de tu boca, una manchita color castaño en la parte de atrás de tus bragas, una palabra obscena pronunciada en un murmullo de tus labios húmedos, un ruido sin recato, repentino, de tu trasero y entonces asciende un feo olor por tus espaldas. En algunos momentos me siento loco, con ganas de hacerlo de alguna forma sucia, sentir tus lujuriosos labios ardientes, chupándome, follar entre tus dos senos coronados de rosa, en tu cara y derramarme en tus mejillas ardientes y en tus ojos, conseguir la erección frotándome contra tus nalgas y poseerte sodomíticamente.¡Basta per stasera!Espero que te haya llegado mi telegrama y lo hayas comprendido.Adiós, querida mía a quien trato de degradar y pervertir.¿Cómo sobre esta tierra de Dios es posible que ames una cosa como yo?¡Oh, estoy tan ansioso de recibir tu respuesta, querida!JIM........................
8 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín
Mi dulce putita Nora, he hecho como me lo pediste, muchachita sucia y me hice dos pajas mientras leía tu carta. Me deleita ver que haces como si te follara por atrás. Sí, ahora puedo recordar esa noche cuando de follé por atrás mucho tiempo. Fue la follada más sucia que te he hecho, querida. Horas y horas mi sexo estuvo duro dentro tuyo, entrando y saliendo de tu trasero vuelto hacia arriba. Sentía tus rollizas nalgas sudorosas bajo mi vientre y veía tu rostro y tus ojos enloquecidos. A cada una de mis arremetidas tu desvergonzada lengua salía de entre tus labios, y si te embestía con mayor fuerza que la usual, gruesos y sucios gases surgían balbuceantes de tu trasero. Tenías un culo lleno de pedos aquella noche, querida, y con la follada salieron todos para afuera, gruesos camaradas, otros más ventosos, rápidos y pequeños requiebros alegres y una gran cantidad de peditos sucios que terminaron en un largo chorrear de tu agujero. Es delicioso follarse a una mujer con pedos cuando cada embestida le saca uno. Estoy seguro que podría reconocer los de ella en un cuarto lleno de mujeres flatulentas. Es un ruido mucho más juvenil, que en nada se parece a los flatos húmedos que deben poseer las esposas gordas. Es más repentino y seco y sucio como el que imagino haría para divertirse una muchacha desnuda en el dormitorio de la escuela por la noche. Espero que Nora dejará escapar sus gases en mi rostro para que también pueda conocer su olor.Dices que a la vuelta me vas a chupar y quieres que lama tu sexo, pequeña pícara depravada. Espero que alguna vez me sorprendas durmiendo vestido, me asaltes con un destello de puta en tus soñolientos ojos, me desabroches con suavidad, botón por botón en el vuelo de mi trusa, y saques gentilmente la gruesa fusta de tu amante, la escondas en tu boca húmeda y la mames hasta que dura y erectísima acabe en tu boca. Algunas veces también te sorprenderé dormida, levantaré tu camisón y abriré suavemente tus bombachas caliente; suavemente me recostaré y comenzaré a lamer con placidez alrededor de tu sexo. Te agitarás incómoda, entonces lameré los labios del sexo de mi querida. Te pondrás a gruñir y a gemir, a suspirar y pedorrear ávida en tu sueño. Entonces lameré más rápido, como un perro voraz, hasta que tu sexo sea una masa de suciedad y tu cuerpo un corcoveo salvaje.¡Buenas noches, mi pequeña Nora pedorra, mi sucia pajarita folladora! Hay una palabra amable, querida que subrayaste para que me masturbara mejor. Escríbeme más acerca de eso y de ti misma, dulcemente, totalmente sucia, totalmente sucia.JIM...........9 de diciembre de 190944 Fontenoy Street, DublínMi dulce sucia pajarita folladora. Aquí está otra nota para comprar bragas bonitas o ligueros o ligas. Compra bragas de puta amor, y trata de perfumarlas con algún suave aroma y de decorarlas también un poquito por atrás.Pareces ansiosa de saber cómo recibí tu carta que dices es peor que la mía. ¿Cómo que es peor que la mía, amor? Sí, es peor en una o dos de sus partes. Me refiero a la parte en la que dices que lo harás con tu lengua (no me refiero a que me chupes) y en esa amable palabra que escribiste tan grande y subrayaste, pequeña pícara. Es estremecedor escuchar esa palabra (y una o dos de las que no escribiste) en los labios de una chica. Pero ojalá hables de ti y no de mí. Escríbeme una carta larga, larga, llena de esas y otras cosas acerca de ti, querida. Ahora ya sabes cómo endurecérmela. Dime las cosas mínimas acerca de ti tan minuciosamente como sean de obscenas, sucias y secretas. No escribas más. Deja a cada oración llenarse de sucias palabras y sonidos sin recato. Son lo más amable de oír y de ver en el papel, porque las más sucias son las más bellas.Las dos partes de tu cuerpo que hacen las cosas más sucias son las que yo más quiero. Prefiero tu culo, querida, a tus tetitas porque hace cosas más sucias. Si amo tanto tu coño no es por ser la parte de tu cuerpo que penetro, sino porque hace otra cosa sucia. Puedo pasar todo el día acostado masturbándome en la contemplación de la divina palabra que escribiste, y la cosa que dices quisieras hacer con tu lengua. Ojalá pudiera oír a tus labios murmurando esas poderosamente excitantes palabras obscenas, ver tu boca haciendo ruidos y sonidos lascivos, sentir tu cuerpo agitándose debajo de mí, oír y oler los gruesos sucios pedos de muchacha ir pop pop fuera de tu hermoso culo de muchacha desnuda y follar, follar, follar a mi ardiente culo sucio de pajarita folladora por siempre.Estoy contento ahora, porque mi putita me dijo que quiere entregarme su trasero, y quiere que la folle por su boca, y quiere desabotonarme y sacar mi palito y mamarlo como una teta. Más y más sucias que éstas quiere mi pequeña folladora desnuda que le haga, mi perversa excitable amante, mi dulce pedorrita obscena.Buenas noches mi coñito, me voy a acostar y pajearme hasta acabar. Escribe más y más sucias cosas, querida. Acaricia tu coñito mientras me escribes para hacer peor y peor lo que escribes. Escribe grandes las palabras obscenas y subráyalas y bésalas y ponlas un momento en tu dulce sexo caliente, querida, y también levanta un momento tu vestido y ponlas debajo de tu querido culito pedorro. Haz más si quieres y mándame entonces la carta, mi querida pajarita folladora del trasero café.JIM------------[Fragmento de una carta]Dublín, 13 de diciembre de 1909...ir a otras? Tú puedes dármelo todo y más de lo que ellas pueden. ¿Querida, crees definitivamente en mi amor? ¡Oh, hazlo, Nora! ¿Acaso no se lee en mis ojos cuando hablo de ti? Como dice tu madre, "se iluminan como velas en mi cabeza".Cariño, ahora el tiempo pasará volando hasta que tus brazos me estrechen. Nunca te abandonaré de nuevo. No sólo deseo tu cuerpo (como sabes), sino también tu compañía. Querida mía, supongo que mi amor por ti parece pobre y raído comparado con tu generoso y espléndido amor hacia mí. Pero es el mejor que puedo ofrecerte, querido amor mío. Acepta mi amor, sálvame y protégeme. Soy tu niño, ya te dije, y debes ser dura conmigo, pequeña madre mía. Castígame tanto como quieras. Me parecería delicioso sentir mi carne estremeciéndose bajo tu mano. ¿Sabes lo que quiero decir, Nora mía? Desearía que me pegaras o incluso que me azotaras. No jugando, querida, sino en serio, y en mi carne desnuda. Desearía que fueras dura, dura, querida, y tuvieras grandes y orgullosos pechos y muslos rollizos. ¡Querría ser azotado por ti, Nora, amor! Me hubiera gustado hacer alguna cosa que te molestara, siquiera algo trivial, quizá mejor una de mis sucias costumbres que te hacen reír: y escuchar entonces que me llamas a tu cuarto y encontrarte sentada en la silla de brazos con tus robustos muslos abiertos y tu cara bien roja de ira y un bastón en la mano. Te veo mostrándome lo que hice y entonces con un movimiento de rabia me empujarás hacia ti y hundirás mi rostro en tu seno. Entonces sentiré tus manos bajándome la trusa y hurgando dentro de la ropa y levantando la camisa, para encontrarme luchando con tus fuertes brazos en tu seno y sentirte inclinada sobre mí (como una nodriza que fustiga el trasero de un niño) hasta que tus grandes y llenos pechos casi me toquen y te sienta azotarme, azotarme, azotarme malvadamente en mi carne desnuda y estremecida! Perdóname, cariño, si esto es insensato. Empiezo la carta con total tranquilidad y debo terminarla ahora en mi estilo alocado.Querida, ¿estás ofendida por mi forma desvergonzada de escribir? Supongo que algunas de las cosas obscenas que escribí te hicieron sonrojar. ¿Estás enfadada porque te dije que me gustaba mirar la mancha oscura que aparece tras tus bragas blancas de adolescente? Supongo que me consideras un inmundo desgraciado. ¿Cómo contestarás estas cartas? Espero, y espero que tú también me escribas cartas incluso más desaforadas y sucias que las mías.Nora, puedes hacerlo si sólo lo deseas, pero también debo decirte que [INCONCLUSA]............
16 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín
Dulce niña querida, ¡finalmente me escribes! Seguro que has masturbado ferozmente ese sucio coñito tuyo para escribirme una carta tan incoherente. En cuanto a mí, estoy tan fuera de forma que tendrás que lamerme una buena hora antes que pueda tener un cuerno lo suficientemente firme para metértelo, no digamos para follarte. He hecho tanto y tan seguido que me da miedo mirar cómo lo he hecho, después de todo me lo he hecho. Querida, por favor no me folles demasiado a mi vuelta. Folla todo lo que quieras fuera de mí por ahí de la primera noche; pero dame tiempo para reponerme. Querida, toda la follada debe ser hecha por ti, porque como estoy blando y diminuto ninguna niña en Europa, a excepción tuya, desperdiciaría su tiempo y energía conmigo. Fóllame, querida; en todas las nuevas formas que tu deseo sugiera. Fóllame ataviada con tus vestidos de calle, con tu velo y tu sombrero puestos, con tu cara sonrosada por el viento y el frío y la lluvia y tus botas embarradas; fóllame también a caballo sobre mis piernas, cuando esté sentado en una silla, montándome de arriba hacia abajo mostrándome los ribetes de tus bragas y mi pito firmemente clavado en tu coño, o móntame sobre la espalda de un sillón. Desnuda, fóllame, solamente con tus medias y tu sobrero puesto, acostados en el piso, con una flor roja en el culo, montándome como un hombre, con tus muslos entre los míos y tu robusto trasero. Móntame vestida con tu bata de estar (ojalá tengas esa tan bonita), con nada debajo de ella, ábrela repentinamente y muéstrame tu vientre y tus muslos y tu espalda y empújame sobre ti, encima de la mesa de la cocina. Fóllame con tu culo, boca abajo en la cama, con tu cabello suelto, desnuda, pero con tus adorables bragas rosas perfumadas, abiertas desvergonzadamente de atrás y medio caídas, de modo que se pueda entrever un poco tu trasero. Fóllame si puedes acuclillada en el baño, con tus vestidos levantados gruñendo como una puerca que caga y una gran cosa gruesa sucia serpenteando con lentitud fuera de tu trasero. Fóllame en las escaleras, en la oscuridad, como una niñera follando con su soldado, que le desabotona gentilmente la trusa y desliza su mano en su pajarito y lo acaricia con su camisa y con ese contacto se va humedeciendo y entonces lo toma con suavidad y lo acaricia junto con sus dos bolas a punto de estallar y finalmente agarra atrevida la pija que ella mama y la manosea y la acaricia suavemente, murmurando para él en sus oídos palabras obscenas e historias indecentes que otras chicas le han contado a ella y ella dice cosas sucias y se mea las bragas con placer y deja salir suave, quieta tranquilamente tibios peditos de su trasero hasta que su clítoris está tan firme como el de él y de pronto se lo mete y lo monta.¡Basta! ¡Basta per Dio!He acabado y todas las tonterías han desaparecido. ¡Ahora, la respuesta a tus preguntas!Todavía no hemos inaugurado. Te mando algunos carteles. Esperamos inaugurar el veinte o veintiuno. Cuenta catorce días a partir de entonces y tres y medio más para el viaje y estaré en Trieste.Prepárate. Coloca un lindo linóleo marrón agradable en la cocina y, por la noche, cuelga un par de cortinas rojas comunes en las ventanas. Procura un sillón cómodo y barato para tu perezoso amante. Haz todo lo que te digo, querida, pues una vez que llegue no me moveré de esa cocina en una semana, leyendo, repantingándome y mirando como preparas la comida; y hablándote, hablándote, hablándote, ¡Qué supremamente feliz seré! ¡Dios mío, allí seré feliz! I figlioli, il fuoco, una bona mangiata, un caffé nero, un Brasil, il Piccolo della cera, e Nora, Nora mía, Norina, Noretta, Norella, Noruccia, etc, etc...Eva y Eileen deben dormir juntas. Consigue algún lugar para Georgie. Quiero que Nora y yo tengamos dos camas para el trabajo nocturno. Estoy manteniendo y mi mantendré mi promesa, amor mío. ¡El tiempo vuela, vuela rápidamente! Quiero regresar a mi amor, mi vida, mi estrella, mi pequeña Irlanda de ojos extraños! ¡Cien mil besos, cariño!JIM........
20 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín
Mi dulce y pícara Nora, recibí esa noche tu ardiente carta y he tratado de imaginarte frotándote el sexo en el baño. ¿Cómo lo haces? ¿Te recuestas contra la pared con tu mano cosquilleándote debajo de tus ropas? ¿O te acuclillas bajo el agujero con las camisas vueltas hacia arriba y tu mano trabajando fuertemente a través de la abertura de tus bragas? ¿Te sirvió como preludio ahora para cagar? Me pregunto cómo pudiste hacerlo. ¿Acabas al cagar o te frotas acabando primero y luego cagas? Debe haber sido una horrible cosa lasciva ver a una niña con sus ropas levantadas frotando con furor su coño, ver sus calzoncillos blancos y hermosos bajados de atrás y su trasero defecando y una cosa gruesa y café que sale de su agujero. Dijiste que ensuciarías tus bragas, querida, y que después me dejarías follarte. Me gustaría oírte primero enmierdarlas y follarte después. Alguna noche, cuando estemos en alguna parte hablando en la oscuridad cosas puercas y sientas tu mierda a punto de salir, rodea mi cuello con tus brazos en tu vergüenza y déjala caer suavemente. El sonido me enloquecerá y cuando alce tu vestido...¡De nada sirve continuar! ¡Ya puedes adivinar qué!Hoy abrió el cinematógrafo. El domingo 2 de enero salgo par Trieste. Espero que hayas hecho lo que te dije respecto a la cocina, el linóleo, el sillón y las cortinas. A propósito, no cosas esas bragas delante de nadie. ¿Está hecho tu vestido? Así lo espero, con una chaqueta larga, con cinturón y con los puños de cuero, etc. No sé como voy a arreglármelas con los gasto de Eileen. ¡Por Dios, arregla tú esto y que pueda yo tener una cama confortable! No tengo ningún deseo especial de hacerte nada, querida. Puedes descansar tranquila respecto a mis idas con ... Tú no lo comprendes. Querida, esto no sucederá.Oh, ahora estoy hambriento. El día que llegue di a Eva que haga un "pudding" corriente y algún tipo de salsa de vainilla sin vino. Me gustaría comer rosbif, sopa de arroz, cupuzzi garbi, puré de patatas, "pudding" y café negro. No, no, me gustaría stracotto di macheroni, una ensalada, ciruelas cocidas, torroni, té y presnitz. O no, preferiría anguilas cocidas o polenta con...Perdóname querida, esta noche estoy hambriento.Querida Nora, espero que pasemos juntos un año feliz. Mañana escribiré a Stanie sobre lo del cinematógrafo.Estoy tan feliz que ahora veo Miramar. Lo único que espero es que no lleve de nuevo conmigo esa abominable cosa, debido a lo que hice. Querida reza por mí.¡Addio, addio, addio, addio!JIM
2 de diciembre de 190944
Fontenoy Street, Dublín
Querida mía, quizás debo comenzar pidiéndote perdón por la increíble carta que te escribí anoche. Mientras la escribía tu carta reposaba junto a mí, y mis ojos estaban fijos, como aún ahora lo están, en cierta palabra escrita en ella. Hay algo de obsceno y lascivo en el aspecto mismo de las cartas. También su sonido es como el acto mismo, breve, brutal, irresistible y diabólico.Querida, no te ofendas por lo que escribo. Me agradeces el hermoso nombre que te di. ¡Si, querida, "mi hermosa flor silvestre de los setos" es un lindo nombre! ¡Mi flor azul oscuro, empapada por la lluvia! Como ves, tengo todavía algo de poeta. También te regalaré un hermoso libro: es el regalo del poeta para la mujer que ama. Pero, a su lado y dentro de este amor espiritual que siento por ti, hay también una bestia salvaje que explora cada parte secreta y vergonzosa de él, cada uno de sus actos y olores. Mi amor por ti me permite rogar al espíritu de la belleza eterna y a la ternura que se refleja en tus ojos o derribarte debajo de mí, sobre tus suaves senos, y tomarte por atrás, como un cerdo que monta a una puerca, glorificado en la sincera peste que asciende de tu trasero, glorificado en la descubierta vergüenza de tu vestido vuelto hacia arriba y en tus bragas blancas de muchacha y en la confusión de tus mejillas sonrosadas y tu cabello revuelto. Esto me permite estallar en lágrimas de piedad y amor por ti a causa del sonido de algún acorde o cadencia musical o acostarme con la cabeza en los pies, rabo con rabo, sintiendo tus dedos acariciar y cosquillear mis testículos o sentirte frotar tu trasero contra mí y tus labios ardientes chupar mi pija mientras mi cabeza se abre paso entre tus rollizos muslos y mis manos atraen la acojinada curva de tus nalgas y mi lengua lame vorazmente tu sexo rojo y espeso. He pensado en ti casi hasta el desfallecimiento al oír mi voz cantando o murmurando para tu alma la tristeza, la pasión y el misterio de la vida y al mismo tiempo he pensado en ti haciéndome gestos sucios con los labios y con la lengua, provocándome con ruidos y caricias obscenas y haciendo delante de mí el más sucio y vergonzoso acto del cuerpo. ¿Te acuerdas del día en que te alzaste la ropa y me dejaste acostarme debajo de ti para ver cómo lo hacías? Después quedaste avergonzada hasta para mirarme a los ojos.¡Eres mía, querida, eres mía! Te amo. Todo lo que escribí arriba es sólo un momento o dos de brutal locura! La última gota de semen ha sido inyectada con dificultad en tu sexo antes que todo termine y mi verdadero amor hacia ti, el amor de mis versos, el amor de mis ojos, por tus extrañamente tentadores ojos llega soplando sobre mi alma como un viento de aromas. Mi pija está todavía tiesa, caliente y estremecida tras la última, brutal embestida que te ha dado cuando se oye levantarse un himno tenue, de piadoso y tierno culto en tu honor, desde los oscuros claustros de mi corazón.Nora, mi fiel querida, mi pícara colegiala de ojos dulces, sé mi puta, mi amante, todo lo que quieras (¡mi pequeña pajera amante! ¡mi putita folladora!) eres siempre mi hermosa flor silvestre de los setos, mi flor azul oscuro empapada por la lluvia.
JIM
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6 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín.
¡Noretta mía! Esta tarde recibí la conmovedora carta en la que me cuentas que andabas sin ropa interior. El día veinticinco no conseguí las doscientas coronas, sino sólo cincuenta, y otras cincuenta el día primero. Esto es todo en lo que al dinero se refiere. Te envío un pequeño billete de banco y espero que al menos puedas comprarte un lindo par de bragas, y te mandaré más cuando me paguen de nuevo. Me gustaría que usaras bragas con tres o cuatro adornos, uno sobre el otro, desde las rodillas hasta los muslos, con grandes lazos escarlata, es decir, no bragas de colegiala con un pobre ribete de lazo angosto, apretado alrededor de las piernas y tan delgado que se ve la piel entre ellos, sino bragas de mujer (o, si prefieres la palabra) de señora, con los bajos completamente sueltos y perneras anchas, llenos lazos y cintas, y con abundante perfume de modo que las enseñes, ya sea cuando alces la ropa rápidamente o cuando te abrace bellamente, lista para ser amada, pueda ver solamente la ondulación de una masa de telas y así cuando me recueste encima de ti para abrirlos y darte un beso ardiente de deseo en tu indecente trasero desnudo, pueda oler el perfume de tus bragas tanto como el caliente olor de tu sexo y el pesado aroma de tu trasero.Te habrán impresionado las cosas sucias que te escribo. Quizás pienses que mi amor es una cosa sucia. Lo es, querida, en algunos momentos. Te sueño a veces en posiciones obscenas. Imagino cosas muy sucias, que no escribiré hasta que vea qué es lo que tú me escribes. Los más insignificantes detalles me producen una gran erección. Un movimiento lascivo de tu boca, una manchita color castaño en la parte de atrás de tus bragas, una palabra obscena pronunciada en un murmullo de tus labios húmedos, un ruido sin recato, repentino, de tu trasero y entonces asciende un feo olor por tus espaldas. En algunos momentos me siento loco, con ganas de hacerlo de alguna forma sucia, sentir tus lujuriosos labios ardientes, chupándome, follar entre tus dos senos coronados de rosa, en tu cara y derramarme en tus mejillas ardientes y en tus ojos, conseguir la erección frotándome contra tus nalgas y poseerte sodomíticamente.¡Basta per stasera!Espero que te haya llegado mi telegrama y lo hayas comprendido.Adiós, querida mía a quien trato de degradar y pervertir.¿Cómo sobre esta tierra de Dios es posible que ames una cosa como yo?¡Oh, estoy tan ansioso de recibir tu respuesta, querida!JIM........................
8 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín
Mi dulce putita Nora, he hecho como me lo pediste, muchachita sucia y me hice dos pajas mientras leía tu carta. Me deleita ver que haces como si te follara por atrás. Sí, ahora puedo recordar esa noche cuando de follé por atrás mucho tiempo. Fue la follada más sucia que te he hecho, querida. Horas y horas mi sexo estuvo duro dentro tuyo, entrando y saliendo de tu trasero vuelto hacia arriba. Sentía tus rollizas nalgas sudorosas bajo mi vientre y veía tu rostro y tus ojos enloquecidos. A cada una de mis arremetidas tu desvergonzada lengua salía de entre tus labios, y si te embestía con mayor fuerza que la usual, gruesos y sucios gases surgían balbuceantes de tu trasero. Tenías un culo lleno de pedos aquella noche, querida, y con la follada salieron todos para afuera, gruesos camaradas, otros más ventosos, rápidos y pequeños requiebros alegres y una gran cantidad de peditos sucios que terminaron en un largo chorrear de tu agujero. Es delicioso follarse a una mujer con pedos cuando cada embestida le saca uno. Estoy seguro que podría reconocer los de ella en un cuarto lleno de mujeres flatulentas. Es un ruido mucho más juvenil, que en nada se parece a los flatos húmedos que deben poseer las esposas gordas. Es más repentino y seco y sucio como el que imagino haría para divertirse una muchacha desnuda en el dormitorio de la escuela por la noche. Espero que Nora dejará escapar sus gases en mi rostro para que también pueda conocer su olor.Dices que a la vuelta me vas a chupar y quieres que lama tu sexo, pequeña pícara depravada. Espero que alguna vez me sorprendas durmiendo vestido, me asaltes con un destello de puta en tus soñolientos ojos, me desabroches con suavidad, botón por botón en el vuelo de mi trusa, y saques gentilmente la gruesa fusta de tu amante, la escondas en tu boca húmeda y la mames hasta que dura y erectísima acabe en tu boca. Algunas veces también te sorprenderé dormida, levantaré tu camisón y abriré suavemente tus bombachas caliente; suavemente me recostaré y comenzaré a lamer con placidez alrededor de tu sexo. Te agitarás incómoda, entonces lameré los labios del sexo de mi querida. Te pondrás a gruñir y a gemir, a suspirar y pedorrear ávida en tu sueño. Entonces lameré más rápido, como un perro voraz, hasta que tu sexo sea una masa de suciedad y tu cuerpo un corcoveo salvaje.¡Buenas noches, mi pequeña Nora pedorra, mi sucia pajarita folladora! Hay una palabra amable, querida que subrayaste para que me masturbara mejor. Escríbeme más acerca de eso y de ti misma, dulcemente, totalmente sucia, totalmente sucia.JIM...........9 de diciembre de 190944 Fontenoy Street, DublínMi dulce sucia pajarita folladora. Aquí está otra nota para comprar bragas bonitas o ligueros o ligas. Compra bragas de puta amor, y trata de perfumarlas con algún suave aroma y de decorarlas también un poquito por atrás.Pareces ansiosa de saber cómo recibí tu carta que dices es peor que la mía. ¿Cómo que es peor que la mía, amor? Sí, es peor en una o dos de sus partes. Me refiero a la parte en la que dices que lo harás con tu lengua (no me refiero a que me chupes) y en esa amable palabra que escribiste tan grande y subrayaste, pequeña pícara. Es estremecedor escuchar esa palabra (y una o dos de las que no escribiste) en los labios de una chica. Pero ojalá hables de ti y no de mí. Escríbeme una carta larga, larga, llena de esas y otras cosas acerca de ti, querida. Ahora ya sabes cómo endurecérmela. Dime las cosas mínimas acerca de ti tan minuciosamente como sean de obscenas, sucias y secretas. No escribas más. Deja a cada oración llenarse de sucias palabras y sonidos sin recato. Son lo más amable de oír y de ver en el papel, porque las más sucias son las más bellas.Las dos partes de tu cuerpo que hacen las cosas más sucias son las que yo más quiero. Prefiero tu culo, querida, a tus tetitas porque hace cosas más sucias. Si amo tanto tu coño no es por ser la parte de tu cuerpo que penetro, sino porque hace otra cosa sucia. Puedo pasar todo el día acostado masturbándome en la contemplación de la divina palabra que escribiste, y la cosa que dices quisieras hacer con tu lengua. Ojalá pudiera oír a tus labios murmurando esas poderosamente excitantes palabras obscenas, ver tu boca haciendo ruidos y sonidos lascivos, sentir tu cuerpo agitándose debajo de mí, oír y oler los gruesos sucios pedos de muchacha ir pop pop fuera de tu hermoso culo de muchacha desnuda y follar, follar, follar a mi ardiente culo sucio de pajarita folladora por siempre.Estoy contento ahora, porque mi putita me dijo que quiere entregarme su trasero, y quiere que la folle por su boca, y quiere desabotonarme y sacar mi palito y mamarlo como una teta. Más y más sucias que éstas quiere mi pequeña folladora desnuda que le haga, mi perversa excitable amante, mi dulce pedorrita obscena.Buenas noches mi coñito, me voy a acostar y pajearme hasta acabar. Escribe más y más sucias cosas, querida. Acaricia tu coñito mientras me escribes para hacer peor y peor lo que escribes. Escribe grandes las palabras obscenas y subráyalas y bésalas y ponlas un momento en tu dulce sexo caliente, querida, y también levanta un momento tu vestido y ponlas debajo de tu querido culito pedorro. Haz más si quieres y mándame entonces la carta, mi querida pajarita folladora del trasero café.JIM------------[Fragmento de una carta]Dublín, 13 de diciembre de 1909...ir a otras? Tú puedes dármelo todo y más de lo que ellas pueden. ¿Querida, crees definitivamente en mi amor? ¡Oh, hazlo, Nora! ¿Acaso no se lee en mis ojos cuando hablo de ti? Como dice tu madre, "se iluminan como velas en mi cabeza".Cariño, ahora el tiempo pasará volando hasta que tus brazos me estrechen. Nunca te abandonaré de nuevo. No sólo deseo tu cuerpo (como sabes), sino también tu compañía. Querida mía, supongo que mi amor por ti parece pobre y raído comparado con tu generoso y espléndido amor hacia mí. Pero es el mejor que puedo ofrecerte, querido amor mío. Acepta mi amor, sálvame y protégeme. Soy tu niño, ya te dije, y debes ser dura conmigo, pequeña madre mía. Castígame tanto como quieras. Me parecería delicioso sentir mi carne estremeciéndose bajo tu mano. ¿Sabes lo que quiero decir, Nora mía? Desearía que me pegaras o incluso que me azotaras. No jugando, querida, sino en serio, y en mi carne desnuda. Desearía que fueras dura, dura, querida, y tuvieras grandes y orgullosos pechos y muslos rollizos. ¡Querría ser azotado por ti, Nora, amor! Me hubiera gustado hacer alguna cosa que te molestara, siquiera algo trivial, quizá mejor una de mis sucias costumbres que te hacen reír: y escuchar entonces que me llamas a tu cuarto y encontrarte sentada en la silla de brazos con tus robustos muslos abiertos y tu cara bien roja de ira y un bastón en la mano. Te veo mostrándome lo que hice y entonces con un movimiento de rabia me empujarás hacia ti y hundirás mi rostro en tu seno. Entonces sentiré tus manos bajándome la trusa y hurgando dentro de la ropa y levantando la camisa, para encontrarme luchando con tus fuertes brazos en tu seno y sentirte inclinada sobre mí (como una nodriza que fustiga el trasero de un niño) hasta que tus grandes y llenos pechos casi me toquen y te sienta azotarme, azotarme, azotarme malvadamente en mi carne desnuda y estremecida! Perdóname, cariño, si esto es insensato. Empiezo la carta con total tranquilidad y debo terminarla ahora en mi estilo alocado.Querida, ¿estás ofendida por mi forma desvergonzada de escribir? Supongo que algunas de las cosas obscenas que escribí te hicieron sonrojar. ¿Estás enfadada porque te dije que me gustaba mirar la mancha oscura que aparece tras tus bragas blancas de adolescente? Supongo que me consideras un inmundo desgraciado. ¿Cómo contestarás estas cartas? Espero, y espero que tú también me escribas cartas incluso más desaforadas y sucias que las mías.Nora, puedes hacerlo si sólo lo deseas, pero también debo decirte que [INCONCLUSA]............
16 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín
Dulce niña querida, ¡finalmente me escribes! Seguro que has masturbado ferozmente ese sucio coñito tuyo para escribirme una carta tan incoherente. En cuanto a mí, estoy tan fuera de forma que tendrás que lamerme una buena hora antes que pueda tener un cuerno lo suficientemente firme para metértelo, no digamos para follarte. He hecho tanto y tan seguido que me da miedo mirar cómo lo he hecho, después de todo me lo he hecho. Querida, por favor no me folles demasiado a mi vuelta. Folla todo lo que quieras fuera de mí por ahí de la primera noche; pero dame tiempo para reponerme. Querida, toda la follada debe ser hecha por ti, porque como estoy blando y diminuto ninguna niña en Europa, a excepción tuya, desperdiciaría su tiempo y energía conmigo. Fóllame, querida; en todas las nuevas formas que tu deseo sugiera. Fóllame ataviada con tus vestidos de calle, con tu velo y tu sombrero puestos, con tu cara sonrosada por el viento y el frío y la lluvia y tus botas embarradas; fóllame también a caballo sobre mis piernas, cuando esté sentado en una silla, montándome de arriba hacia abajo mostrándome los ribetes de tus bragas y mi pito firmemente clavado en tu coño, o móntame sobre la espalda de un sillón. Desnuda, fóllame, solamente con tus medias y tu sobrero puesto, acostados en el piso, con una flor roja en el culo, montándome como un hombre, con tus muslos entre los míos y tu robusto trasero. Móntame vestida con tu bata de estar (ojalá tengas esa tan bonita), con nada debajo de ella, ábrela repentinamente y muéstrame tu vientre y tus muslos y tu espalda y empújame sobre ti, encima de la mesa de la cocina. Fóllame con tu culo, boca abajo en la cama, con tu cabello suelto, desnuda, pero con tus adorables bragas rosas perfumadas, abiertas desvergonzadamente de atrás y medio caídas, de modo que se pueda entrever un poco tu trasero. Fóllame si puedes acuclillada en el baño, con tus vestidos levantados gruñendo como una puerca que caga y una gran cosa gruesa sucia serpenteando con lentitud fuera de tu trasero. Fóllame en las escaleras, en la oscuridad, como una niñera follando con su soldado, que le desabotona gentilmente la trusa y desliza su mano en su pajarito y lo acaricia con su camisa y con ese contacto se va humedeciendo y entonces lo toma con suavidad y lo acaricia junto con sus dos bolas a punto de estallar y finalmente agarra atrevida la pija que ella mama y la manosea y la acaricia suavemente, murmurando para él en sus oídos palabras obscenas e historias indecentes que otras chicas le han contado a ella y ella dice cosas sucias y se mea las bragas con placer y deja salir suave, quieta tranquilamente tibios peditos de su trasero hasta que su clítoris está tan firme como el de él y de pronto se lo mete y lo monta.¡Basta! ¡Basta per Dio!He acabado y todas las tonterías han desaparecido. ¡Ahora, la respuesta a tus preguntas!Todavía no hemos inaugurado. Te mando algunos carteles. Esperamos inaugurar el veinte o veintiuno. Cuenta catorce días a partir de entonces y tres y medio más para el viaje y estaré en Trieste.Prepárate. Coloca un lindo linóleo marrón agradable en la cocina y, por la noche, cuelga un par de cortinas rojas comunes en las ventanas. Procura un sillón cómodo y barato para tu perezoso amante. Haz todo lo que te digo, querida, pues una vez que llegue no me moveré de esa cocina en una semana, leyendo, repantingándome y mirando como preparas la comida; y hablándote, hablándote, hablándote, ¡Qué supremamente feliz seré! ¡Dios mío, allí seré feliz! I figlioli, il fuoco, una bona mangiata, un caffé nero, un Brasil, il Piccolo della cera, e Nora, Nora mía, Norina, Noretta, Norella, Noruccia, etc, etc...Eva y Eileen deben dormir juntas. Consigue algún lugar para Georgie. Quiero que Nora y yo tengamos dos camas para el trabajo nocturno. Estoy manteniendo y mi mantendré mi promesa, amor mío. ¡El tiempo vuela, vuela rápidamente! Quiero regresar a mi amor, mi vida, mi estrella, mi pequeña Irlanda de ojos extraños! ¡Cien mil besos, cariño!JIM........
20 de diciembre de 1909
44 Fontenoy Street, Dublín
Mi dulce y pícara Nora, recibí esa noche tu ardiente carta y he tratado de imaginarte frotándote el sexo en el baño. ¿Cómo lo haces? ¿Te recuestas contra la pared con tu mano cosquilleándote debajo de tus ropas? ¿O te acuclillas bajo el agujero con las camisas vueltas hacia arriba y tu mano trabajando fuertemente a través de la abertura de tus bragas? ¿Te sirvió como preludio ahora para cagar? Me pregunto cómo pudiste hacerlo. ¿Acabas al cagar o te frotas acabando primero y luego cagas? Debe haber sido una horrible cosa lasciva ver a una niña con sus ropas levantadas frotando con furor su coño, ver sus calzoncillos blancos y hermosos bajados de atrás y su trasero defecando y una cosa gruesa y café que sale de su agujero. Dijiste que ensuciarías tus bragas, querida, y que después me dejarías follarte. Me gustaría oírte primero enmierdarlas y follarte después. Alguna noche, cuando estemos en alguna parte hablando en la oscuridad cosas puercas y sientas tu mierda a punto de salir, rodea mi cuello con tus brazos en tu vergüenza y déjala caer suavemente. El sonido me enloquecerá y cuando alce tu vestido...¡De nada sirve continuar! ¡Ya puedes adivinar qué!Hoy abrió el cinematógrafo. El domingo 2 de enero salgo par Trieste. Espero que hayas hecho lo que te dije respecto a la cocina, el linóleo, el sillón y las cortinas. A propósito, no cosas esas bragas delante de nadie. ¿Está hecho tu vestido? Así lo espero, con una chaqueta larga, con cinturón y con los puños de cuero, etc. No sé como voy a arreglármelas con los gasto de Eileen. ¡Por Dios, arregla tú esto y que pueda yo tener una cama confortable! No tengo ningún deseo especial de hacerte nada, querida. Puedes descansar tranquila respecto a mis idas con ... Tú no lo comprendes. Querida, esto no sucederá.Oh, ahora estoy hambriento. El día que llegue di a Eva que haga un "pudding" corriente y algún tipo de salsa de vainilla sin vino. Me gustaría comer rosbif, sopa de arroz, cupuzzi garbi, puré de patatas, "pudding" y café negro. No, no, me gustaría stracotto di macheroni, una ensalada, ciruelas cocidas, torroni, té y presnitz. O no, preferiría anguilas cocidas o polenta con...Perdóname querida, esta noche estoy hambriento.Querida Nora, espero que pasemos juntos un año feliz. Mañana escribiré a Stanie sobre lo del cinematógrafo.Estoy tan feliz que ahora veo Miramar. Lo único que espero es que no lleve de nuevo conmigo esa abominable cosa, debido a lo que hice. Querida reza por mí.¡Addio, addio, addio, addio!JIM
viernes, 13 de noviembre de 2009
viernes, 6 de noviembre de 2009
despierta
despierta en tu orilla
vestida para nacer
no miro hacia atrás
la calle desierta
la mano cerrada
despojos y harapos
olvidos y destrozos,
horas solitarias
las noches infinitas,
solo partes de mí
negro sin blanco
nunca tan gris
dormida y etérea
en tu orilla
aromas a rosas y sal
estrellas y lunas
y mil locuras hay
mezcla de mentes
y todas las partes de mi
tiempo de siembra
jueves, 5 de noviembre de 2009
sobraban
Sobraban las palabras para describir lo que pasaba
Todo se envolvía de un oscuro silencio
Solo una cálida mirada, se ofrecía de consuelo
Para esa noche que moría encendida o que nacía
Completa de dolor y herida de maldad
No había final, principio, pared, ni dirección.
Tampoco punto cardinal
Tampoco punto cardinal
Era un sueño, o el mundo, parecía la vida
Sobraban las caricias infinitas e imploradas
Para calmar el frío y la oscuridad
Solo una cálida mirada, se ofrecía de consuelo
Para esas lagrimas que marchitaron el alba
Que brotaron como lluvia, que llenaron de mar el lecho
Era un sueño, o el mundo, parecía la vida
Que dolía
Sobraban los aromas para saber lo que pasaba
Sobraban manos, que no tenían piel
sobraba piel que no era poseída
Solo una cálida mirada, se ofrecía de consuelo
Para la tormenta que torneada sacudía el alma
Sobraba la ausencia, la soledad
Sobraban lo orgasmos, ahogados en silencio
Solo una cálida mirada, se ofrecía de consuelo
soñaba, pupilas encendidas,
con el sabor de los amantes no permitidos
Sobraban las palabras para describir lo que pasaba
Sobraban las luces para saber que entre sueños vivía
Y sin voz, sin ecos, sin sabanas, sin respiración,
sin pecado, Sin puntos cardinales, soñaba,
como vivía
martes, 3 de noviembre de 2009
esbelta
Ella, esbelta, la mirada perdida con un rictus de tristeza se recortaba su perfil frente al mar. La cabeza erguida, su cabello acariciándole el cuello, sus labios con una enigmática sonrisa, el perfil de sus senos, la curva de su cintura, la forma de sus piernas realzadas por un pantalón ajustado.Alguien, él… en la lejanía soñaba con sentir ese pelo, acariciar ese cuello, besar esos labios, mirar esos ojos, tomarla de la mano y desnudos abrazarse, sentir el roce de los cuerpos y el palpitar de los sexos que se buscan y luego entrar en el agua cálida de su mar, navegar por las olas de su piel y llegar juntos al puerto del éxtasis....mar y viento son...serán......El en la lejanía y en silencio, miraba su foto y la deseaba...
cristina peri rossi
“Herida que queda, luego del amor, al costado del cuerpo.
Tajo profundo, lleno de peces y bocas rojas,
donde la sal duele, y arde el yodo,
que corre todo a lo largo del buque,
que deja pasar la espuma, que tiene un ojo triste en el centro.
En la actividad de navegar, como en el ejercicio del amor,
ningún marino, ningún capitán,
ningún armador, ningún amante,
han podido evitar esa suerte de heridas,
escoriaciones profundas, que tienen el largo del cuerpo
y la profundidad del mar, cuya cicatriz no desaparece nunca,
y llevamos como estigmas de pasadas navegaciones, de otras travesías.
Por el número de escoriaciones
del buque, conocemos la cantidad de sus viajes;
por las escoriaciones de nuestra piel,
cuántas veces hemos amado”.
ilusiones y sombras...
Noche negra e infinita
como la aprendi
cargada de incertidumbres,y de serena calma
pero sin certezas certeras
y sin abrazos
llena de un vacio silencio
noche negra
en la que se quedaron a dormir
las sombras, las de la vida
en nuestra misma cama
noche ...noche
apagando a las ilusiones
que se pierden en este viaje, oscureciendo a las promesas
a esas, las vacías de amor
y a las otras ,las colmadas
de vida....noche infinita
la que oculta a las làgrimas
la que seduce al olvido
envuelta en las mismas sabanas
noche de sueños
y de lluvia
y de instantes de ahogarse
en miles de sensaciones no conocidas
noche de bestias
noche de luna llena
noche sin vos...y con vos
noche de ilusiones y sombras
noche destructiva
de pequeños mundos nuevos
noche desgarradora de sueños
de esas que hacen caer al vacio,
los cadáveres del olvido
oscura oscuridad de la noche
no sos culpable de mi miseria.
Es mi alma gris
Mas negra e infinita que vos
Noche no te culpes..
Por morir en la mañana
Solo espero la luz del alba
Ser ilusion sin sombras
Luz y abrazos
Sueños....vivos
Noche....no te culpes
Fui yo
Todo nosotros...
Cae la tarde
O muere el día
Según quien lo quiera ver
Mansa el agua espera
Tranquila en su lecho
Tranquila en su lecho
Un niño corre por la arena
Canta en un idioma extranjero
Juega en colores verdaderos
dos jóvenes se besan
en la arena, cerca de la orilla
Canta en un idioma extranjero
Juega en colores verdaderos
dos jóvenes se besan
en la arena, cerca de la orilla
Unas gaviotas vuelan
unos cangrejos huyen
Un perro ladra
a veces
un hada se hace silencio
a veces
un hada se hace silencio
a veces
Se acercan las nubes
dos jóvenes se besan
dos que se abrazan,
a veces
Se tiñe el cielo de colores
Muriendo el día
O cayendo la tarde
Según quien lo quiera ver
dos jóvenes se besan
dos que se abrazan,
a veces
Se tiñe el cielo de colores
Muriendo el día
O cayendo la tarde
Según quien lo quiera ver
dos jóvenes se besan y se abrazan
En la arena, cerca de la orilla
En la arena, cerca de la orilla
a veces
todo se llenaba de nosotros
Y se respiraba la calma
todo era nosotros
Y se respiraba la calma
todo era nosotros
En la arena, cerca o lejos de tu orilla
Cuando moría la tarde
Y aun corría un niño en la arena
Cuando moría la tarde
Y aun corría un niño en la arena
Todo era nosotros.
en obra...
sueño y muero
desde ese dia
en que nos cruzamos
en aquel espacio en obra
construyendo
una historia
estamos
en tus labios encuentro poesia
y de tus ojos obtengo luz
Que me da vida
Que me da vida
camino Serena
recitando versos
Me alimento de vos
Tan cerca y tan lejos del mundo
Estamos..
y no estamos
recitando versos
Me alimento de vos
Tan cerca y tan lejos del mundo
Estamos..
y no estamos
me desgarran tus ladridos
Me conquistan tus palabras
Me conquistan tus palabras
y buscando tus huellas
Me duermo
despierto en tus brazos
en la orilla
Vos en mi y yo en vos
Me duermo
despierto en tus brazos
en la orilla
Vos en mi y yo en vos
Lene una copa con mis palabras
Llené una copa con mis palabras,
las destilé, las hice fermentar, las dejé envejecer
y las escancié generosamente
en las bocas de quienes las deseaban para expresarse.
Y dijeron amor y la mejor broma,
y el deseo se tornó en palabras
que salían de gargantas de oro, de gargantas de plata,
en las que tarareaban las palabras
y hacían albórbolas en las bodas de nuestras aldeas...
Llené una copa con mis palabras,
las destilé, las hice fermentar, las dejé envejecer
y las escancié generosamente
en las bocas de quienes las deseaban para expresarse.
Y dijeron odio y la broma más amarga,
y la puñalada se tornó palabra
que salía de gargantas de cobre, de gargantas de plomo.
En ellas se carcajeaban las palabras,
ladraban, y ladraban
las prostitutas en los arrabales de la ciudad.
Este es nuestro vino: nuestras palabras destiladas
para que peregrinen por nuestras entrañas,
para que las sintamos bullir en nuestra sangre,
para que nos aterren las visiones.
Escanciamos las palabras con cicatería
a quienes nos aman y a quienes nos odian
y les sueltan, como el vino, el corazón y la lengua.
Os mantenemos ocupados,
al menos durante una noche,
con nuestras entrañas,
nuestra sangre
y nuestras visiones.
Yabra Ibrahim Yabra "Tammuz fi-l-madina"
Contenida y abrazada
En la orilla buscada
En la noche, el hada
Sintió como los fantasmas
Del futuro, presente y pasado
Recorrían silenciosos
Su vertical estabilidad de vidrio
Se le transformó la piel
Se congelo su alma
Muto a sal la miel
Se acuno en ella la certeza
De que algo pasaría
No sabe cuando
en algún tiempo de arena
la certeza se mecía y se mecía
y se volvia sombras
Quiere renunciar a esos hechizos
Negar que adivina
Que anticipa a la lluvia
Al frío, a los finales,
Y a los destinos
Muda, renegó de sus alas
Desafió a gritos al viento
Quiere olvidarse de esos hechizos
Sorda, reto a los fantasmas
Con el mismo silencio conocido
Quiere ser mujer con frío
Solo por el frío..
En calma, solo por la calma
Abrazada, en tu cama
Hasta el alba
No adivinar, sin alas,
Sin sueños de olvido
Solo mujer
en calma
Nunca jamás hada,
con frìo
En la orilla buscada
En la noche, el hada
Sintió como los fantasmas
Del futuro, presente y pasado
Recorrían silenciosos
Su vertical estabilidad de vidrio
Se le transformó la piel
Se congelo su alma
Muto a sal la miel
Se acuno en ella la certeza
De que algo pasaría
No sabe cuando
en algún tiempo de arena
la certeza se mecía y se mecía
y se volvia sombras
Quiere renunciar a esos hechizos
Negar que adivina
Que anticipa a la lluvia
Al frío, a los finales,
Y a los destinos
Muda, renegó de sus alas
Desafió a gritos al viento
Quiere olvidarse de esos hechizos
Sorda, reto a los fantasmas
Con el mismo silencio conocido
Quiere ser mujer con frío
Solo por el frío..
En calma, solo por la calma
Abrazada, en tu cama
Hasta el alba
No adivinar, sin alas,
Sin sueños de olvido
Solo mujer
en calma
Nunca jamás hada,
con frìo
hoy ya es...
Hoy ya es mañana
Muto de formas y de colores,
Ya no soy yo...
Metamoforseo mi ser
Cierro los ojos,
Y los vuelvo a abrir,
Ignoro lo que veo
Me banco lo que escucho
Espanto a los fantasmas
Chu chu .....
Porque hoy ya es mañana
Y yo, ya no soy yo
Espanto a los fantasmas
Chu chu....
A los del desamor,
Los de la ausencia
Y los del silencio
Los ato con cadenas
Los ignoro...
Tapo sus bocas y sus ojos
Porque hoy ya es mañana
Y yo, ya no soy yo
Muto de formas y de colores,
Ya no soy yo...
Metamoforseo mi ser
Cierro los ojos,
Y los vuelvo a abrir,
Ignoro lo que veo
Me banco lo que escucho
Espanto a los fantasmas
Chu chu .....
Porque hoy ya es mañana
Y yo, ya no soy yo
Espanto a los fantasmas
Chu chu....
A los del desamor,
Los de la ausencia
Y los del silencio
Los ato con cadenas
Los ignoro...
Tapo sus bocas y sus ojos
Porque hoy ya es mañana
Y yo, ya no soy yo
El salto...
Un salto.Solo un salto.Solo un salto y encontraré la libertad.
La muerte no es libertad, solo un hombre vivo en plenitud puede ser libre, el saltar desde aquí arriba no va a solucionar nada. Habla conmigo. Dime la verdad.No hay que huir de los problemas de esa manera, estos cincuenta metros no son la salvación. ¿En serio crees que es la única salida? Que dejando que la muerte use tu piel a su antojo ella abrigará tu libertad. La muerte no es libertad y tu lo sabes, es solo una forma rápida de dejar tu cuerpo, incluso tu alma. Perderás todo lo que tienes.¿Por qué cuesta tanto vivir?He sido fiel al mundo... ¿y así me pagan? Dejándome al asedio de la soledad. Dejándome que me olvidara de mi vida.¡No quiero seguir así! He dejado de ser yo mismo, me estoy convirtiendo en lo que siempre odié. Yo no era así. Yo era libre, aunque quizás mi libertad haya sido falsa, pero me convencí tanto que llegué a creérmelo, e incluso me dejó un mejor sabor que aquella felicidad que todos creen tener. Yo soy consciente. Soy un iluso consciente. Pero de iluso he pasado a ser idiota, un idiota sin remedio, que creyó que la vida era justamente eso. Que todo se resumía a ser feliz. Pero ¿qué significa para el mundo ser feliz? Levantarte todas las mañanas y que te sirvan el desayuno en la cama, llevar a tus hijos a la escuela, ir a trabajar de aquello que no te gusta solo para ganar dinero y poder sostener a tu familia.Esa no es mi felicidad. Yo quería el mundo, dejar bien marcada mi huella.¿Puede ser más fuerte esta falsa felicidad que una convicción que se tiene por verdadera durante toda un vida?¿Soy un idiota por dejarme seducir por esta felicidad, o soy un idiota por no haberla saboreado como el común de la gente? No, mi error fue dejar que se impusieran frente a mí. Yo no quise hacerme un lado, el orgullo pudo más. Yo soy hombre de otro vivir y ahora siento que la vida ya no huele a vida, se ha desvirtuado su condición, se ha dejado llevar por las aparienciasTu sabes que tu vida solo la puedes vivir vos, pero hace falta coraje, ponerle el pecho a las balas pero no dejar que te maten. Por lo tanto solo tu puedes decidir si saltar o no. Si tu vida ya no es lo que era, la puedes cambiar. Ahora. Pero no de esta manera. Aún eres joven, tienes toda un vida por delante.Sabes que ya no soy tan joven, mi vida ha transcurrido demasiado deprisa como para que me diera cuenta que se iba alejando. Perdí demasiado tiempo, ya no me queda tanto como antes.Yo soy bastante mayor que vos y aún tengo deseo de vivir, queda mucho por conocer, no decías que querías sentirlo todo, que deseabas probarlo todo. Me parece que el idiota he sido yo por haberme creído todo lo que me decías. Yo te admiraba. Aún siendo menor que yo, vos eras más fuerte, le hacías frente a todos, tenías ideales de hierro, eras inquebrantable.¿Te acordás cuando le hiciste frente a mi padre, con solo ocho años, porque sabías que él me maltrataba? Yo nunca me había animado a hacerle frente, ni siquiera mi madre. Pero vos sabías bien que la situación no podía seguir así. Para mí fuiste un héroe y no uno de bronce de esos que posan sobres sus caballos en el medio de alguna plaza de la ciudad, vos eras un héroe de carne y hueso, uno real que vivía a la vuelta de la esquina. Y solo tenías ocho años. ¿Te acordás? Ahora dudo que te acuerdes. Tus ojos no brillan igual. No creo que seas capaz de acordarte lo que sentiste en ese momento.Ya eres adulto, ahora tienes que pensar en otras cosas, ¿no es así?. El corazón de un hombre es enorme, pero tu no tuviste lugar suficiente para dar asilo a tu niño interior, el tiempo consumió tu inocencia, te dio sabiduría pero a cambio se llevó todo tu deseo, esa ignorancia que te hacia poseedor parcial de tu vida. Ya no sos igual. Mi héroe se fue derritiendo, ya no es un héroe de piel curtida. Mis ideales caen, se llenan de polvo o se los lleva el viento, tan lejos que con él también se va su esencia....y ahora aquella persona que me inculcó lo que realmente vale en la vida, me mostró los ideales más nobles, me mostró los caminos pero me dejó que los recorriera solo, que tropezara, aunque siempre me ayudó a levantarme, lavó con su propia sangre mis heridas, me mostró que la sangre no lo es todo, que a veces vale más un amigo que un hermano, llegó a ser todo lo que yo creía noble en un hombre, yo quería enseñarle a mis hijos los mismos valores que me enseño esta persona, este hombre, este amigo, este hermano, la parte más importante de mí mismo... que creía como valor fundamental la elevación de los ideales, el nunca dejarlos caer, nunca dejarlos que nadie los pisoteara, elevarlos como lo más noble que nos queda en la vida, y en la muerte también, este hombre, este amigo ahora quiere olvidar todo aquello que él mismo me enseñó y me cosió bajo la piel haciendo que fuera imposible olvidarme lo que vale la vida, este amigo quiere dejarme solo creyendo que solo así encontrará su libertad, aquella que le ha sido difícil mantener en vida, ahora quiere morir, quiere dejarse caer al vacío, creyendo esta salida como la última forma de encontrar la salvación.¿Qué más puedo hacer? Todo en lo que creía se ha esfumado, mi amor se ha hecho humo y se ha desparramado por todo el aire que ahora apesta a desilusión, apesta a olvido rancio, a valores humanos putrefactos faltos de sabiduría. El mundo ha perdido su esencia, el desencanto se ha convertido en el sentimiento típico de esta era de vacío, vacío de valores, vacío de oportunidades para todos, vacío de mentes, vacío de estómagos. La valentía ya no existe más, todo ahora tiene otro motivo, la economía es el valor más noble de esta sociedad que se va desfragmentando, los ricos son los más nobles de espíritu, el Sr. Dólar es nuestro dios. Yo no quiero vivir en un mundo donde la única forma de asegurarte el plato del día que te llene el estómago sea ser ladrón de guantes blancos o ser un simple empleado que trabaje casi doce horas en un frigorífico de dueños extranjeros que visten gorritas en las cabezas mientras pasean hablando en quién sabe que idioma por la plaza principal de la ciudad, solo para ganar algunos pesos y no tener derecho a nada, ser un obrero más trabajando en negro. Yo quería ser alguien más en este mundo, tenía sueños, pero hace tiempo se vieron desinflados ante esta realidad que están tejiendo aquellas arañas que tienen el poder, y no precisamente el poder del pueblo sino el poder del dinero. Me enfrenté, no dejé de luchar, pero mi paciencia y mi fuerza se vieron agotados, se sintieron desfallecer, y con mi fuerza también quedaron mis ganas de seguir luchando y con mi lucha también quedó mi vida.Por eso usaré ahora lo poco de fuerza que me queda y será mi manera de decir “Basta”. Este será mi último acto de valentía. ¿A qué te refieres con un último acto de valentía? ¿Crees que saltar es un acto de valientes? Tu me enseñaste lo que es la valentía, y esta definición nunca me la enseñaste.No seas idiota, no te conviertas en una victoria para ellos. ¡Arriba los que luchan!Tu sabes más que nadie que el sistema se nutre de esto, que esto lo hace más fuerte más indestructible. La gente se acostumbra y luego se transforma en un hecho totalmente natural y el siguiente paso será letal, será algo totalmente normal, la gente lo verá como algo de todos los días.Para ser valiente hay que tener huevos y enfrentarse a lo que haya que enfrentarse, nuestra arma más infalible es nuestra inteligencia, y no solo la nuestra sino la de todo aquel que lucha día a día para seguir sobreviviendo.El valiente es aquel que busca sobre todo sobrevivir en esta gran ciudad sin fronteras que se va convirtiendo en la selva más inhóspita.Siento decirte que lo que estas haciendo es un acto puro de cobardía, hay que ser valiente para enfrentar este gran dolor que estás sufriendo. Yo sé que vos sos capaz de ponerte de pie. No hagas de tu dolor una forma de vida, y como verás estoy hablando con tus propias palabras. Vos no sos tu dolor, sos la piel que encierra todo.¡Si el suicidio es valentía prefiero pecar por cobardía! No desperdicies tu único honor de saber que aunque creas haber perdido todo te queda el orgullo, sabes que no te puedes despedir así. Este no puede ser el último acto de tu vida.Yo no me olvido de los ojos que pusiste cuando te conté sobre la muerte de mi madre, a pesar de ser lo que era, vos sabías que era la persona más importante para mí, solo por vos recuperé las ganas de vivir, me ayudaste a superar el duelo, y solo faltó un abrazo y mirarte a los ojos para entender todo lo que me querías decir. Seguí viviendo, ni gracias a mi padre, ni gracias a ninguno de mis hermanos, si lo logré fue gracias a vos. Ahora el dolor es tuyo, yo solo puedo darte un abrazo, mirarte a los ojos y decirte que hasta daría mi propia vida a cambio de verte sonreír, de verte con ganas de seguir viviendo.Sabes que no estás solo, yo siempre voy a estar y queda también tu hija, ¡carajo! Si no lo haces por ti, hazlo por ella. Ella te necesita, aún está creciendo, necesita que le enseñes algunas cosas sobre la vida, aún no se puede despegar de ti.No metas a mi hija en esto, sabes bien que ella ahora está lejos, y quién sabe cuando la volvería a ver. Ahora ella tiene un vida distinta a la mía, tiene otro tiempos, tiene metas, yo no la quiero meter en este asunto, no lo entendería. Sabes que mi relación con su madre va de mal en peor, se me hace difícil verla. Debe de tener incluso otro padre.No digas eso. Ella te quiere, eres su padre.¿Pero y si ella ya no lo siente así?Claro que te quiere como su padre, ¿cómo no podría quererte?No estaría tan seguro. Las relaciones se desgastan. La vida cambia, se aleja, se transforma. Las cosas no son como eran cuando ella era una niña, ahora se está convirtiendo en mujer, y ya no necesita a un padre que esté con ella.Ella siempre te va a necesitar. Necesita un amor paterno. Ahora más que nunca, ahora que se va a dar los primeros tropiezos con la vida, donde la vida nos muestra su dolor, tu tienes que estar ahí para consolarla y ayudarla a levantar, como me ayudaste a mí cuando comenzábamos en este juego de sentirnos adultos, de creernos adultos. Pero ahora solo soy las cenizas de aquel fuego, mi vida es solo un recuerdo, una sombra que se pierde con el ocaso, se vuelve solo oscuridad. Ella será siempre mi hija, pero yo ya he dejado de ser su padre. He perdido el amor por cuanto exista en la Tierra, no siento deseo por nada, solo soy un sueño amargo.No pienses esto como un suicidio, sino como mi último deseo al destino. La suerte está echada. La moneda gira en el aire y está a punto de caer.Pero tu sabes bien quién tira la moneda. Tú. Tu lanzas la moneda por lo tanto tienes el derecho de pararla cuando quieras. No tienes que dejar que caiga. Tómala. Cómprale un regalo a tu hija y ve a visitarla. Eso te quitará todas las dudas. Solo hace falta un poco de amor en tu vida, solo mírala a los ojos y sabrás que saltar no es lo correcto.¿Quién dice qué es correcto o incorrecto en esta vida? ¿Dios?Si por ejemplo. Él está para guiarnos en la vida...No me hagas reír. ¡Dios!. Lo único que me faltaba. Parecía raro que no empezaras con tus sermones religiosos. Sabes que Dios es solo un sueño idiota, sus principios van en contra de la vida. Yo no cargaré con la culpa, yo no arrastro ninguna cruz, no obedezco ningún pecado, mi libertad es hacer lo que se me dé gusto y gana.No digas palabras que te hayan sido impuestas, no pierdas el tiempo en alabar un pedazo de madera. La religión solo busca controlarte. Busca la vida por ti mismo. ¿Buscar la vida por mí mismo? Eso es lo que yo he estado tratando de decirte, pero tu te niegas a verlo. Pareces que ni siquiera crees en lo que dices. Esto no es sobre mí. Eres tú el que tienes que buscar la vida y saltando justamente nunca lo lograrás. Ni tu sabes bien por qué estás haciendo esto, no crees que esta sea la solución, sabes que no estás decidido a saltar. Aunque quieras hacerlo siempre habrá algo que te tirará hacia atrás. No eres un idiota, no te dejes convencer por un impulso. Tienes que vencer esta batalla, y solo viviendo lo lograrás. ¡Vamos! Haz un paso atrás, ven conmigo yo te espero. Vayámonos de este lugar, bajemos la escalera. Sé que quieres venir conmigo, solo hazlo...Tienes razón, no puedo terminar así, ¿pero qué otra cosa puedo hacer?Basta de preguntas. Guarda las preguntas para el camino que sabemos será largo.Vayamos a cenar, yo invito, como en los viejos tiempos que comíamos juntos después de salir de las clases de la UniversidadPero tu sabes que aún no he ganado ninguna batalla, ¿cómo podré enfrentarme a esta en semejante condiciones?Está será la pelea más difícil, pero solo tu puedes ganarla, pero sabes que yo estaré contigo por siempre... hermano.Una victoria.Solo una victoria.Solo una victoria y encontraré la libertad.
Mauricio Paz
18 de Setiembre de 2004
La muerte no es libertad, solo un hombre vivo en plenitud puede ser libre, el saltar desde aquí arriba no va a solucionar nada. Habla conmigo. Dime la verdad.No hay que huir de los problemas de esa manera, estos cincuenta metros no son la salvación. ¿En serio crees que es la única salida? Que dejando que la muerte use tu piel a su antojo ella abrigará tu libertad. La muerte no es libertad y tu lo sabes, es solo una forma rápida de dejar tu cuerpo, incluso tu alma. Perderás todo lo que tienes.¿Por qué cuesta tanto vivir?He sido fiel al mundo... ¿y así me pagan? Dejándome al asedio de la soledad. Dejándome que me olvidara de mi vida.¡No quiero seguir así! He dejado de ser yo mismo, me estoy convirtiendo en lo que siempre odié. Yo no era así. Yo era libre, aunque quizás mi libertad haya sido falsa, pero me convencí tanto que llegué a creérmelo, e incluso me dejó un mejor sabor que aquella felicidad que todos creen tener. Yo soy consciente. Soy un iluso consciente. Pero de iluso he pasado a ser idiota, un idiota sin remedio, que creyó que la vida era justamente eso. Que todo se resumía a ser feliz. Pero ¿qué significa para el mundo ser feliz? Levantarte todas las mañanas y que te sirvan el desayuno en la cama, llevar a tus hijos a la escuela, ir a trabajar de aquello que no te gusta solo para ganar dinero y poder sostener a tu familia.Esa no es mi felicidad. Yo quería el mundo, dejar bien marcada mi huella.¿Puede ser más fuerte esta falsa felicidad que una convicción que se tiene por verdadera durante toda un vida?¿Soy un idiota por dejarme seducir por esta felicidad, o soy un idiota por no haberla saboreado como el común de la gente? No, mi error fue dejar que se impusieran frente a mí. Yo no quise hacerme un lado, el orgullo pudo más. Yo soy hombre de otro vivir y ahora siento que la vida ya no huele a vida, se ha desvirtuado su condición, se ha dejado llevar por las aparienciasTu sabes que tu vida solo la puedes vivir vos, pero hace falta coraje, ponerle el pecho a las balas pero no dejar que te maten. Por lo tanto solo tu puedes decidir si saltar o no. Si tu vida ya no es lo que era, la puedes cambiar. Ahora. Pero no de esta manera. Aún eres joven, tienes toda un vida por delante.Sabes que ya no soy tan joven, mi vida ha transcurrido demasiado deprisa como para que me diera cuenta que se iba alejando. Perdí demasiado tiempo, ya no me queda tanto como antes.Yo soy bastante mayor que vos y aún tengo deseo de vivir, queda mucho por conocer, no decías que querías sentirlo todo, que deseabas probarlo todo. Me parece que el idiota he sido yo por haberme creído todo lo que me decías. Yo te admiraba. Aún siendo menor que yo, vos eras más fuerte, le hacías frente a todos, tenías ideales de hierro, eras inquebrantable.¿Te acordás cuando le hiciste frente a mi padre, con solo ocho años, porque sabías que él me maltrataba? Yo nunca me había animado a hacerle frente, ni siquiera mi madre. Pero vos sabías bien que la situación no podía seguir así. Para mí fuiste un héroe y no uno de bronce de esos que posan sobres sus caballos en el medio de alguna plaza de la ciudad, vos eras un héroe de carne y hueso, uno real que vivía a la vuelta de la esquina. Y solo tenías ocho años. ¿Te acordás? Ahora dudo que te acuerdes. Tus ojos no brillan igual. No creo que seas capaz de acordarte lo que sentiste en ese momento.Ya eres adulto, ahora tienes que pensar en otras cosas, ¿no es así?. El corazón de un hombre es enorme, pero tu no tuviste lugar suficiente para dar asilo a tu niño interior, el tiempo consumió tu inocencia, te dio sabiduría pero a cambio se llevó todo tu deseo, esa ignorancia que te hacia poseedor parcial de tu vida. Ya no sos igual. Mi héroe se fue derritiendo, ya no es un héroe de piel curtida. Mis ideales caen, se llenan de polvo o se los lleva el viento, tan lejos que con él también se va su esencia....y ahora aquella persona que me inculcó lo que realmente vale en la vida, me mostró los ideales más nobles, me mostró los caminos pero me dejó que los recorriera solo, que tropezara, aunque siempre me ayudó a levantarme, lavó con su propia sangre mis heridas, me mostró que la sangre no lo es todo, que a veces vale más un amigo que un hermano, llegó a ser todo lo que yo creía noble en un hombre, yo quería enseñarle a mis hijos los mismos valores que me enseño esta persona, este hombre, este amigo, este hermano, la parte más importante de mí mismo... que creía como valor fundamental la elevación de los ideales, el nunca dejarlos caer, nunca dejarlos que nadie los pisoteara, elevarlos como lo más noble que nos queda en la vida, y en la muerte también, este hombre, este amigo ahora quiere olvidar todo aquello que él mismo me enseñó y me cosió bajo la piel haciendo que fuera imposible olvidarme lo que vale la vida, este amigo quiere dejarme solo creyendo que solo así encontrará su libertad, aquella que le ha sido difícil mantener en vida, ahora quiere morir, quiere dejarse caer al vacío, creyendo esta salida como la última forma de encontrar la salvación.¿Qué más puedo hacer? Todo en lo que creía se ha esfumado, mi amor se ha hecho humo y se ha desparramado por todo el aire que ahora apesta a desilusión, apesta a olvido rancio, a valores humanos putrefactos faltos de sabiduría. El mundo ha perdido su esencia, el desencanto se ha convertido en el sentimiento típico de esta era de vacío, vacío de valores, vacío de oportunidades para todos, vacío de mentes, vacío de estómagos. La valentía ya no existe más, todo ahora tiene otro motivo, la economía es el valor más noble de esta sociedad que se va desfragmentando, los ricos son los más nobles de espíritu, el Sr. Dólar es nuestro dios. Yo no quiero vivir en un mundo donde la única forma de asegurarte el plato del día que te llene el estómago sea ser ladrón de guantes blancos o ser un simple empleado que trabaje casi doce horas en un frigorífico de dueños extranjeros que visten gorritas en las cabezas mientras pasean hablando en quién sabe que idioma por la plaza principal de la ciudad, solo para ganar algunos pesos y no tener derecho a nada, ser un obrero más trabajando en negro. Yo quería ser alguien más en este mundo, tenía sueños, pero hace tiempo se vieron desinflados ante esta realidad que están tejiendo aquellas arañas que tienen el poder, y no precisamente el poder del pueblo sino el poder del dinero. Me enfrenté, no dejé de luchar, pero mi paciencia y mi fuerza se vieron agotados, se sintieron desfallecer, y con mi fuerza también quedaron mis ganas de seguir luchando y con mi lucha también quedó mi vida.Por eso usaré ahora lo poco de fuerza que me queda y será mi manera de decir “Basta”. Este será mi último acto de valentía. ¿A qué te refieres con un último acto de valentía? ¿Crees que saltar es un acto de valientes? Tu me enseñaste lo que es la valentía, y esta definición nunca me la enseñaste.No seas idiota, no te conviertas en una victoria para ellos. ¡Arriba los que luchan!Tu sabes más que nadie que el sistema se nutre de esto, que esto lo hace más fuerte más indestructible. La gente se acostumbra y luego se transforma en un hecho totalmente natural y el siguiente paso será letal, será algo totalmente normal, la gente lo verá como algo de todos los días.Para ser valiente hay que tener huevos y enfrentarse a lo que haya que enfrentarse, nuestra arma más infalible es nuestra inteligencia, y no solo la nuestra sino la de todo aquel que lucha día a día para seguir sobreviviendo.El valiente es aquel que busca sobre todo sobrevivir en esta gran ciudad sin fronteras que se va convirtiendo en la selva más inhóspita.Siento decirte que lo que estas haciendo es un acto puro de cobardía, hay que ser valiente para enfrentar este gran dolor que estás sufriendo. Yo sé que vos sos capaz de ponerte de pie. No hagas de tu dolor una forma de vida, y como verás estoy hablando con tus propias palabras. Vos no sos tu dolor, sos la piel que encierra todo.¡Si el suicidio es valentía prefiero pecar por cobardía! No desperdicies tu único honor de saber que aunque creas haber perdido todo te queda el orgullo, sabes que no te puedes despedir así. Este no puede ser el último acto de tu vida.Yo no me olvido de los ojos que pusiste cuando te conté sobre la muerte de mi madre, a pesar de ser lo que era, vos sabías que era la persona más importante para mí, solo por vos recuperé las ganas de vivir, me ayudaste a superar el duelo, y solo faltó un abrazo y mirarte a los ojos para entender todo lo que me querías decir. Seguí viviendo, ni gracias a mi padre, ni gracias a ninguno de mis hermanos, si lo logré fue gracias a vos. Ahora el dolor es tuyo, yo solo puedo darte un abrazo, mirarte a los ojos y decirte que hasta daría mi propia vida a cambio de verte sonreír, de verte con ganas de seguir viviendo.Sabes que no estás solo, yo siempre voy a estar y queda también tu hija, ¡carajo! Si no lo haces por ti, hazlo por ella. Ella te necesita, aún está creciendo, necesita que le enseñes algunas cosas sobre la vida, aún no se puede despegar de ti.No metas a mi hija en esto, sabes bien que ella ahora está lejos, y quién sabe cuando la volvería a ver. Ahora ella tiene un vida distinta a la mía, tiene otro tiempos, tiene metas, yo no la quiero meter en este asunto, no lo entendería. Sabes que mi relación con su madre va de mal en peor, se me hace difícil verla. Debe de tener incluso otro padre.No digas eso. Ella te quiere, eres su padre.¿Pero y si ella ya no lo siente así?Claro que te quiere como su padre, ¿cómo no podría quererte?No estaría tan seguro. Las relaciones se desgastan. La vida cambia, se aleja, se transforma. Las cosas no son como eran cuando ella era una niña, ahora se está convirtiendo en mujer, y ya no necesita a un padre que esté con ella.Ella siempre te va a necesitar. Necesita un amor paterno. Ahora más que nunca, ahora que se va a dar los primeros tropiezos con la vida, donde la vida nos muestra su dolor, tu tienes que estar ahí para consolarla y ayudarla a levantar, como me ayudaste a mí cuando comenzábamos en este juego de sentirnos adultos, de creernos adultos. Pero ahora solo soy las cenizas de aquel fuego, mi vida es solo un recuerdo, una sombra que se pierde con el ocaso, se vuelve solo oscuridad. Ella será siempre mi hija, pero yo ya he dejado de ser su padre. He perdido el amor por cuanto exista en la Tierra, no siento deseo por nada, solo soy un sueño amargo.No pienses esto como un suicidio, sino como mi último deseo al destino. La suerte está echada. La moneda gira en el aire y está a punto de caer.Pero tu sabes bien quién tira la moneda. Tú. Tu lanzas la moneda por lo tanto tienes el derecho de pararla cuando quieras. No tienes que dejar que caiga. Tómala. Cómprale un regalo a tu hija y ve a visitarla. Eso te quitará todas las dudas. Solo hace falta un poco de amor en tu vida, solo mírala a los ojos y sabrás que saltar no es lo correcto.¿Quién dice qué es correcto o incorrecto en esta vida? ¿Dios?Si por ejemplo. Él está para guiarnos en la vida...No me hagas reír. ¡Dios!. Lo único que me faltaba. Parecía raro que no empezaras con tus sermones religiosos. Sabes que Dios es solo un sueño idiota, sus principios van en contra de la vida. Yo no cargaré con la culpa, yo no arrastro ninguna cruz, no obedezco ningún pecado, mi libertad es hacer lo que se me dé gusto y gana.No digas palabras que te hayan sido impuestas, no pierdas el tiempo en alabar un pedazo de madera. La religión solo busca controlarte. Busca la vida por ti mismo. ¿Buscar la vida por mí mismo? Eso es lo que yo he estado tratando de decirte, pero tu te niegas a verlo. Pareces que ni siquiera crees en lo que dices. Esto no es sobre mí. Eres tú el que tienes que buscar la vida y saltando justamente nunca lo lograrás. Ni tu sabes bien por qué estás haciendo esto, no crees que esta sea la solución, sabes que no estás decidido a saltar. Aunque quieras hacerlo siempre habrá algo que te tirará hacia atrás. No eres un idiota, no te dejes convencer por un impulso. Tienes que vencer esta batalla, y solo viviendo lo lograrás. ¡Vamos! Haz un paso atrás, ven conmigo yo te espero. Vayámonos de este lugar, bajemos la escalera. Sé que quieres venir conmigo, solo hazlo...Tienes razón, no puedo terminar así, ¿pero qué otra cosa puedo hacer?Basta de preguntas. Guarda las preguntas para el camino que sabemos será largo.Vayamos a cenar, yo invito, como en los viejos tiempos que comíamos juntos después de salir de las clases de la UniversidadPero tu sabes que aún no he ganado ninguna batalla, ¿cómo podré enfrentarme a esta en semejante condiciones?Está será la pelea más difícil, pero solo tu puedes ganarla, pero sabes que yo estaré contigo por siempre... hermano.Una victoria.Solo una victoria.Solo una victoria y encontraré la libertad.
Mauricio Paz
18 de Setiembre de 2004
La fiera
Aún cuando caiga en la zona más oscura
donde reinan hadas creadas por mis sueños
siempre será tu faro, la luz que me alumbra
iluminando mi camino, activando mi empeño
aún cuando me envuelva con el manto de la noche
y cubra mis ojos, sin dejar que tu los veas
siempre será tu esfinge el lugar donde enfoque
mis tenues pupilas, al volver la primavera.
Tus palabras forjaron parte de mi caracter tan cambiante
mis versos fueron eco, al cruzarse con tu abrigo
aún en los calores, aún en los glaciares
de mis pasos florestales, tu fuiste fiel testigo
hoy crecí, como en un sueño, soy el viejo niño
que quizás muy confundido no te supo expresar
pues los ojos se me nublan, mi voz se desvanece
ante tan febril mensaje, que no puedo ya callarte
quiero amiga, como la paloma a las ramas donde se posa
que en invierno dan calor y dejan formar su ni
doy aún sobre el viento canta gritándote
caeré mil veces, pero tus manos serán mi eterno colchón
así jamás tocaré fondo alguno, y seremos dos volando
y así grito a mis vientos
cuando necesites... estoy contigo... siempre.
Tú me quieres blanca
Tú me quieres blanca
Tú me quieres alba,
me quieres de espumas,
me quieres de nácar.
Que sea azucena
sobre todas, casta.
De perfume tenue.
Corola cerrada.
Ni un rayo de luna
filtrado me haya.
Ni una margarita
se diga mi hermana.
Tú me quieres nívea,
tú me quieres blanca,
tú me quieres alba.
Tú que hubiste todas
las copas a mano,
de frutos y mieles
los labios morados.
Tú que en el banquete
cubierto de pámpanos
dejaste las carnes
festejando a Baco.
Tú que en los jardines
negros del Engaño
vestido de rojo
corriste al Estrago.
Tú que el esqueleto
conservas intacto
no sé todavía
por cuáles milagros,
me pretendes blanca
-Dios te lo perdone-,
me pretendes casta
-Dios te lo perdone-,
¡me pretendes alba!
Huye hacia los bosques,
vete a la montaña;
límpiate la boca;
vive en las cabañas;
toca con las manos
la tierra mojada;
alimenta el cuerpo
con raíz amarga;
bebe de las rocas;
duerme sobre escarcha;
renueva tejido
scon salitre y agua:
Habla con los pájaros
y llévate al alba.
Y cuando las carnes
te sean tornadas,
y cuando hayas puesto
en ellas el alma
que por las alcobas
se quedó enredada,
entonces, buen hombre,
preténdeme blanca,
preténdeme nívea,
preténdeme casta.
alma desnuda
Soy un alma desnuda en estos versos,
Alma desnuda que angustiada y sola
Va dejando sus pétalos dispersos.
Alma que puede ser una amapola,
Que puede ser un lirio, una violeta,
Un peñasco, una selva y una ola.
Alma que como el viento vaga inquieta
Y ruge cuando está sobre los mares,
Y duerme dulcemente en una grieta.
Alma que adora sobre sus altares,
Dioses que no se bajan a cegarla;
Alma que no conoce valladares.
Alma que fuera fácil dominarla
Con sólo un corazón que se partiera
Para en su sangre cálida regarla.
Alma que cuando está en la primavera
Dice al inviemo que demora: vuelve,
Caiga tu nieve sobre la pradera.
Alma que cuando nieva se disuelve
En tristezas, clamando por las rosas
Con que la primavera nos envuelve.
Alma que a ratos suelta mariposas
A campo abierto, sin fijar distancia,
Y les dice libad sobre las cosas.
Alma que ha de morir de una fragancia,
De un suspiro, de un verso en que se ruega,
Sin perder, a poderlo, su elegancia.
Alma que nada sabe y todo niega
Y negando lo bueno el bien propicia
Porque es negando como más se entrega,
Alma que suele haber como delicia
Palpar las almas, despreciar la huella,
Y sentir en la mano una caricia.
Alma que siempre disconforme de ella,
Como los vientos vaga, corre y gira;
Alma que sangra y sin cesar delira
Por ser el buque en marcha de la estrella
T e cuento de Alfonsina
Esbozo biografico...
Ella fue una poeta y escritora argentina de origen suizo. Nació en Sala Capriasca (Suiza) en 1892. En 1896 su familia se trasladó a San Juan y años después, en 1901 se trasladaron a la ciudad de Rosario. Durante su niñez, su familia atravesó estrecheces económicas, y a partir de los diez años Alfonsina se empleó como lavaplatos, camarera, costurera y más tarde como obrera en una fábrica de gorras.En 1907 Alfonsina reemplaza a una actriz enferma en una compañía de teatro que recorría las provincias. En una de sus cartas, escribe, refiriéndose a esta época: "este salto brusco, hijo de una serie de casualidades tuvo una gran influencia en mi actividad sensorial, pues me puso en contacto con las mejores obras del teatro contemporáneo y clásico(...) Pero casi una niña y pareciendo ya una mujer, la vida se me hizo insoportable. Aquel ambiente me ahogaba. Torcí rumbos..."Cuando Alfonsina vuelve a Rosario decide estudiar la carrera de magisterio en Coronda, y allí recibe su título profesional. Consigue un puesto como profesora de arte dramático y se vincula a dos revistas literarias donde publica poemas suyos, si bien no hay testimonio de los poemas publicados durante el primer años, si sabemos de otros publicados al año siguiente en Mundo Argentino. El nacimiento de su hijo Alejandro en abril de 1912 define en su vida una actitud de mujer que se enfrenta sola a sus decisiones. Durante esta época se empleó como cajera y colaboraba en la revista Caras y Caretas.Su primer libro, La inquietud del rosal, publicado con grandes dificultades económicas, apareció en 1916 y marcó el comienzo de su carrera literaria. Es una obra que refleja las cuestiones intimistas y sentimentales de un nuevo romanticismo. Influenciada por la corriente modernista, que traen poetas como Amado Nervo y Rubén Darío, publica sus siguientes obras: “El dulce daño” (1918); “Irremediablemente”(1919); y “Languidez”(1920), que recibió el Primer Premio Municipal de Poesía y el Segundo Premio Nacional de Literatura, lo que la situó muy por encima de sus pares. En 1922 Alfonsina estableció amistad con el pintor Emilio Centurión y con el escritor Horacio Quiroga quien la nombraba frecuentemente en sus cartas y su mención la destaca de un grupo donde había también otras escritoras.
Una larga amistad fue también la que mantuvo con Gabriela Mistral quien tras conocer a Alfonsina escribió
Una larga amistad fue también la que mantuvo con Gabriela Mistral quien tras conocer a Alfonsina escribió
"cabello más hermoso no he visto, es extraño como lo fuera la luz de la luna a mediodía. El ojo azul, la empinada nariz francesa, muy graciosa, y la piel rosada, le dan alguna cosa infantil que desmiente la conversación sagaz y de mujer madura"
Gabriela quedó impresionada por la sencillez de Alfonsina, por su sobriedad, por su profundidad sin trascendentalismos. Y sobretodo por su cultura propia de una persona "que ha pasado tocándolo todo e incorporándoselo".
Alfonsina, intervino en la creación de la Sociedad Argentina de Escritores y su participación en el gremialismo literario fue intensa. En 1928 viajó a España en compañía de la actriz Blanca de la Vega y repitió su viaje en 1931, en compañía de su hijo. Allí conoció a otras mujeres escritoras, y la poeta Concha Méndez le dedica algunos poemas.Sus viajes a Europa en 1930 y 1934, su vida amorosa y su lucha por el papel de la mujer en la sociedad de la época influyeron en un cambio de rumbo poético, que se refleja en sus libros de madurez, donde transforna la experiencia amorosa en cofidencia dramática, reflexiona sobre la condición femenina y transmite una audad sinceridad erótica. Públicó "Mundo de siete pozos" (1934). Toda su obra refleja dramatismo, lucha y una audacia inusual para la época. Su temática es, sobre todo, amorosa, feminista y profunda, en donde se refleja un carácter singular.En mayo de 1935 Alfonsina fue operada de un cáncer de mama, desde entonces se vuelve recluida y evita a sus amistades.
Tras publicar Mascarilla y trebol, en 1938 y una Antología poética con sus poemas preferidos, siguió un duro período de incertidumbre y temor por la renuencia de la enfermedad. El 23de octubre de ese año, Alfonsina viajó a Mar del Plata y en la madrugada del día 25 se internó en las profundas aguas y se dejo llevar por el mar esa noche...
Tras publicar Mascarilla y trebol, en 1938 y una Antología poética con sus poemas preferidos, siguió un duro período de incertidumbre y temor por la renuencia de la enfermedad. El 23de octubre de ese año, Alfonsina viajó a Mar del Plata y en la madrugada del día 25 se internó en las profundas aguas y se dejo llevar por el mar esa noche...
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